El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha hablado en público por primera vez sobre la polémica originada por el ‘caso Salazar’, remarcando que el feminismo ofrece lecciones “todos los días” y recalcando que ya han pedido disculpas y tomado medidas al respecto.
“El feminismo nos da lecciones todos los días, a mí el primero”, ha afirmado el también secretario general del PSOE, evitando aludir de forma expresa a las acusaciones de acoso contra su exasesor en La Moncloa y antiguo miembro de la Ejecutiva Federal socialista.
A continuación ha subrayado: “La gran diferencia entre la derecha y la izquierda es que nosotros, cuando recibimos esas lecciones pedimos perdón y actuamos en consecuencia”.
Estas palabras llegan después de las críticas por la forma en que se gestionaron las denuncias anónimas, ya que el partido no contactó con las presuntas víctimas hasta cuatro meses después de que estas recurrieran al canal interno habilitado en Ferraz.
Este sábado, en una charla informal con periodistas en el Congreso de los Diputados durante el acto de homenaje a la Constitución, Sánchez asumió “en primera persona” el fallo por el retraso en comunicarse con las denunciantes, aunque esta es la primera ocasión en la que aborda el asunto en una comparecencia pública ante las cámaras.
Desde el Gobierno y el PSOE sostienen que apartaron a Salazar de manera inmediata, el pasado mes de julio, en cuanto tuvieron conocimiento de los primeros relatos de mujeres de su equipo en Moncloa que describían conductas inapropiadas.
Asimismo, este mismo fin de semana se ha producido el cese de Antonio Hernández, quien fuera su ‘número dos’ en la Presidencia del Gobierno, tras conocerse nueva información que le señala como posible encubridor de Salazar.