El ex secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, está citado el próximo miércoles para comparecer ante la comisión de investigación del Senado que indaga en todas las derivadas del “caso Koldo”, casi un mes después de abandonar la prisión, donde estuvo interno durante cinco meses tras hacerse público un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que le señalaba como eje de una presunta red de cobro de comisiones ilegales vinculadas a adjudicaciones de obra pública.
Cerdán, investigado por el Tribunal Supremo (TS) por supuestos delitos de pertenencia a organización criminal, tráfico de influencias y cohecho, deberá responder a las preguntas de los senadores el miércoles 17 de diciembre a partir de las 10.00 horas, según figura en el orden del día de la comisión, al que ha tenido acceso Europa Press.
Dada su actual situación procesal, se da por hecho que el ex número tres del PSOE opte por acogerse a su derecho a no declarar, siguiendo la misma estrategia que otros comparecientes en circunstancias similares, con el fin de no perjudicar su defensa en la causa penal.
El exdirigente socialista se presentará en la Cámara Alta después del ingreso en prisión del exministro José Luis Ábalos y del exasesor ministerial Koldo García, con quienes habría encabezado la supuesta trama de corrupción, y pocos días más tarde de que el Tribunal Supremo confirmara la apertura de juicio oral contra Ábalos, Koldo García y el empresario Víctor de Aldama por presuntas irregularidades en los contratos de mascarillas adjudicados por el Ministerio de Transportes durante la pandemia.
En paralelo, su esposa, Francisca Muñoz, no asistirá a la citación fijada ante la misma comisión para el próximo 15 de diciembre, tras comunicar a los servicios de la Cámara Alta que no puede acudir por motivos de salud.
Papel “preeminente” en la presunta red de comisiones
El pasado 30 de junio, el magistrado del Tribunal Supremo encargado de la causa, Leopoldo Puente, ordenó el ingreso en prisión provisional de Cerdán al considerar que desempeñó un papel “preeminente” en la supuesta trama de cobro de comisiones a cambio de adjudicaciones de obra pública.
En su auto, el juez sostuvo que existían indicios de que Cerdán, Ábalos y Koldo García “podrían haber conformado una organización criminal orientada a obtener indebidamente premios económicos por la ilícita adjudicación de obra pública”.
El instructor situó a Cerdán y a Koldo García en el origen del entramado a través de la mercantil Servinabar, en la que Cerdán había tenido participación, y que habría ganado peso tras la llegada de Ábalos al Ministerio de Transportes.
Según esa versión, con el nombramiento de Koldo García como asesor “a instancias” de Cerdán, ambos se “aprovecharon” de esa posición para “canalizar indebidamente determinadas obras públicas licitadas en el marco de dependencia correspondiente al Ministerio”, especialmente en el área de Carreteras y en Adif.
Reclamo de pagos a las constructoras
De este modo, “se procedió a la indebida adjudicación de ciertas obras, a cambio de un precio, precisamente en favor de Acciona Construcciones en Unión Temporal de Empresas (UTE) con terceras empresas de mucha menor envergadura” como Servinabar, de acuerdo con el relato del magistrado.
El rol atribuido a Cerdán habría sido el de “reclamar a las constructoras indebidamente favorecidas por las cantidades adeudadas” para recaudar esos fondos y, finalmente, entregárselos a Ábalos y a García.
Estas conclusiones se apoyan en el primer informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en el que apareció, difundido el pasado 12 de junio, que detallaba su intervención en la supuesta red corrupta y desencadenó, en primer lugar, su dimisión de los cargos orgánicos y, posteriormente, su ingreso en prisión tras comparecer ante el Tribunal Supremo.











