Sumar considera que el tropiezo en el Congreso con la ley de reducción de jornada, aunque duro, puede ser un catalizador para la izquierda y propiciar una movilización social que favorezca su futura aprobación y fortalezca a las fuerzas progresistas.
Tras rechazarse las enmiendas a la totalidad presentadas por PP, Vox y Junts el miércoles pasado, el partido minoritario cree que la presión popular podría hacer que Junts rectifique su posición cuando el tema se retome en el Congreso.
Desde la dirección de Sumar y líderes de partidos aliados se han esforzado en consolidar el apoyo a Díaz, sosteniendo que su iniciativa cuenta con respaldo social y que el rechazo experimentado es en realidad una victoria política frente a la derecha.
Fuentes del grupo parlamentario argumentan que lograr trasladar el debate al ámbito social ya es un éxito, y que este tema pone incómodo al PP, forzándolo a la defensiva.
Dirigentes de la coalición han criticado duramente al PP, describiéndolo como un partido que se alinea con las posturas de Vox y que no favorece el progreso social.
HABÍA QUE SER DUROS CON JUNTS
Apoyan el enfoque firme tomado con Junts en la primera presentación del proyecto, aunque mantienen abierta la posibilidad de negociar. Critican el enfoque táctico de Junts y sugieren que han priorizado lo político sobre lo técnico, ignorando las medidas de apoyo propuestas para las pymes.
Sumar y sus aliados defienden la postura firme de Díaz y sugieren que Junts debería reconsiderar su posición para evitar que la presión social se vuelva en su contra. Además, resaltan el buen hacer de Díaz en el Ministerio de Trabajo, más allá de la jornada de 37,5 horas, destacando logros como el aumento del salario mínimo y la reforma laboral.
Este sábado, la portavoz del Congreso, Verónica Martínez Barbero, destacó que esta derrota en realidad refuerza la posición de la ministra de Trabajo como referente de Sumar.
A LA ESPERA DE DEFINIR LA ESTRATEGIA
Sumar aún evalúa cómo proceder con el proyecto de ley de reducción de jornada y los tiempos a manejar. El día después del revés en el Congreso, el Ministerio de Trabajo lanzó una consulta pública para desarrollar el nuevo registro de jornada y el derecho a la desconexión laboral.
Por otro lado, Podemos ha mostrado su apoyo a la reducción de jornada, aunque considera que la propuesta actual del Ministerio de Trabajo es insuficiente, y ha advertido que estará atento a cualquier concesión a Junts que pueda debilitar la medida.