El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha lanzado críticas contra el presidente del Gobierno, acusándole de “alimentar la protesta” propalestina durante la Vuelta y ha señalado que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha ignorado sus reclamaciones “mirando hacia otro lado”.
Consideran que la cancelación de la etapa final ha sido una prueba de que “el dispositivo ha sido claramente insuficiente, poniendo en riesgo la seguridad de todos”. Esta postura ha sido manifestada a través de un comunicado donde se afirma que “Lo ocurrido hoy ha demostrado que claramente se ha buscado cortar la Vuelta comprometiendo la seguridad de los deportistas, de los ciudadanos y de la propia Policía, todo por conveniencia política”.
“Los policías de la UIP estamos abandonados a nuestra suerte por el Ministerio del Interior”, han destacado desde el sindicato. Asimismo, han criticado que Pedro Sánchez ha decidido “alimentar la protesta, debilitar la autoridad del Estado y dejar en evidencia a los compañeros que, con sacrificio y profesionalidad, sostienen el orden público en España”.
Además, han culpado a “los políticos” de poner en peligro la seguridad de los agentes. “No podemos dejar en manos de intereses políticos la actuación de la Policía. Los criterios operativos y la seguridad ciudadana deben estar por encima de titulares y cálculos políticos. Hoy, de nuevo, se pliega la actuación de la Policía a intereses políticos”, concluyeron.