En una reciente intervención en Gran Canaria, Nicasio Galván, portavoz del Grupo Parlamentario Vox en el Parlamento de Canarias, junto a Alberto Rodríguez Almeida, diputado en el Congreso por Las Palmas, han manifestado que la solución a la inmigración ilegal es «repatriando a todos los que entran ilegalmente en España y, también, a todos aquellos que han entrado legalmente pero se dedican a cometer delitos» en el país.
Los políticos de Vox se pronunciaron frente al recién clausurado centro de menores migrantes en Agüimes, Playa del Cabrón (Gran Canaria), que albergaba a 148 menores. Esta acción se da tras una orden judicial dentro de una mayor investigación sobre los recursos de acogida manejados por la ONG Quórum Social 77 para el Gobierno canario.
«La propuesta de Vox es bien sencilla. Los menores tienen que estar con sus padres en los países de origen. Y la inmigración ilegal, ¿cómo se soluciona? Repatriando automáticamente a todo inmigrante que ha llegado a nuestras costas. Y repatriar también a aquellos inmigrantes legales que hacen del delito su forma de vida», declaró Nicasio Galván a los medios.
Galván también denunció diversos actos criminales asociados a la inmigración en las islas, como «Hemos visto, en Guía, amenazas con machete, en Gáldar, una trama para empadronar a inmigrantes ilegales, y en los Llanos de Aridane, riñas tumultuarias. Por último, también vimos en La Isleta un robo a una mujer al salir de la iglesia».
Además, atribuyó la responsabilidad de esta criminalidad al «bipartidismo» español, con la «colaboración necesaria de Coalición Canaria». En contraposición, la postura de Vox es «claro»: «Todo inmigrante ilegal que llega a nuestras costas debe ser repatriado».
Alberto Rodríguez, por su lado, criticó el «negocio multimillonario» que supone la inmigración ilegal, apoyado según él por PP, PSOE y CC, destacando que el «coste de cada menor extranjero no acompañado es de 145 euros diarios». «Lo que no le damos a los canarios, a los españoles, se lo estamos regalando a aquellos que violentan nuestras fronteras», concluyó.