En el 2º Congreso SOCFIC de Farmacia Comunitaria Iberoamericana, Eduardo Pastor, presidente de Cofares, ha enfatizado la importancia de combinar las ventajas de la farmacia comunitaria y la distribución cooperativa para sostener el modelo farmacéutico de España.
El evento, que se lleva a cabo este fin de semana en Lisboa, reúne a farmacéuticos de 15 países iberoamericanos bajo el lema ‘Farmacia Comunitaria: Más Respuestas a los Desafíos de la Salud’.
Pastor ha participado en una mesa redonda, agradeciendo a SOCFIC y a su presidente, Jesús Gómez, por promover estos encuentros que «permiten desarrollar un proyecto común y potenciar el rol de la farmacia a ambos lados del Atlántico».
En su intervención, destacó que el sistema farmacéutico español es un punto de referencia y un ejemplar a seguir, que «garantiza un acceso equitativo al medicamento en toda la geografía nacional; proporciona una alta cobertura gracias a su capilaridad y accesibilidad; presta una atención personalizada; incorpora servicios asistenciales y apuesta por la innovación».
Pastor resaltó que el éxito de cualquier modelo de farmacia depende de un sistema de distribución efectivo y eficiente. «Junto a nuestros cerca de 12.000 socios, hemos construido un modelo cooperativo líder en España, que se basa en la suma de las fortalezas de la farmacia comunitaria y la distribución farmacéutica. Un binomio de éxito que, incluso en las situaciones más críticas, ha demostrado ser un importante activo para la Salud Pública», explicó.
AVANZANDO EN UN PROYECTO COMÚN
El congreso también abordó los desafíos actuales de la farmacia en Iberoamérica, como la atención a una población envejeciente y el aumento de pacientes crónicos y pluripatológicos. Se destacó que actualmente hay 98 millones de personas mayores de 60 años en estos países, y se prevé que esta cifra se duplique para 2050.
Además, las desigualdades socioeconómicas entre los países iberoamericanos crean diferencias significativas entre las farmacias, lo que llevó a Pastor a subrayar que «es preciso identificar líneas comunes de actuación que faciliten la transición hacia modelos de farmacia asistencial adaptados a las necesidades de cada región».











