Según un reciente estudio de Ipsos realizado en julio, el 48% de los ciudadanos españoles considera a la sanidad pública como uno de los principales problemas en su comunidad autónoma, solo superado por las dificultades en el acceso a la vivienda, que alcanza el 53%. La preocupación por el desempleo se sitúa en un 42%.
La preocupación por la sanidad es «especialmente alta» en comunidades como La Rioja (62%), Asturias y Andalucía (ambas con 57%) y Castilla y León (56%). Por otro lado, el desempleo predomina en Extremadura (57%), seguido de Castilla y León y Castilla La Mancha (46% y 45% respectivamente). En cuanto a la vivienda, lidera la lista de preocupaciones en Baleares (73%) y La Rioja (82%).
A pesar de estos indicadores preocupantes, la sanidad española ha recibido una valoración «moderadamente positiva» de los ciudadanos, con una nota media de 6,6 sobre 10. Las comunidades de Madrid, País Vasco y Cataluña son las mejor valoradas en términos sanitarios, mientras que Extremadura, Murcia, Baleares y Canarias registran las evaluaciones más bajas.
LOS PROFESIONALES SANITARIOS, LO MEJOR VALORADO
Los profesionales sanitarios son el aspecto más aplaudido de la sanidad, con una nota media de 7,6 y un 35% de valoraciones de sobresaliente, destacando en Navarra, Madrid y País Vasco. En contraste, las listas de espera son el aspecto peor valorado, con un 4,7. Madrid y Extremadura presentan los mayores niveles de satisfacción, mientras que Navarra, Comunidad Valenciana y Cantabria los más bajos.
«La percepción ciudadana muestra un sistema con grandes fortalezas en el capital humano sanitario, pero con un desafío persistente en la gestión de tiempos de espera, que concentra el mayor descontento», ha afirmado Silvia Bravo, directora de Investigación de Ipsos.
Además de las listas de espera, otros problemas señalados incluyen dificultades para conseguir citas en Atención Primaria o Especializada. El estudio también indica que muchos ciudadanos en Cantabria, Baleares, Madrid y Murcia perciben mejoras en la sanidad de sus comunidades, un contraste con el resto del país. «Aunque algunas regiones como Madrid, Baleares o Murcia muestran avances, el sentimiento dominante en España es que los tiempos de espera han empeorado, lo que refuerza la necesidad de medidas más efectivas», concluyó Bravo.