La doctora Ana Borda Martín, destacada especialista en aparato digestivo del Hospital Universitario de Navarra y miembro de la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD), ha recomendado el empleo del test inmunológico de sangre oculta en heces (SOH-i) para evaluar a pacientes con síntomas que podrían indicar cáncer de colon. Esta propuesta busca reducir tanto los costos asociados como las prolongadas listas de espera que implica realizar una colonoscopia.
En su intervención titulada ‘¿Podemos priorizar la necesidad de una colonoscopia tras un test de sangre oculta en heces positivo?’ durante el 84 Congreso de la SEPD en Bilbao, Borda explicó que este test, sencillo y económico, permite decidir sobre la necesidad de efectuar una colonoscopia basándose en los resultados obtenidos. “En los numerosos estudios publicados, la sensibilidad de la prueba oscila alrededor del 94 por ciento, con una especificidad del 85 por ciento”, señaló.
La especialista también detalló cómo se debería establecer el umbral de corte de la prueba para considerarla positiva o negativa, lo cual permitiría priorizar quién necesita una colonoscopia. Según Borda, este umbral variará según la prevalencia de la enfermedad y los recursos disponibles, sugiriendo un umbral más bajo en áreas de alta prevalencia y uno más alto en zonas de menor incidencia para reducir el número de procedimientos y los costos.
El Instituto Nacional para la Excelencia en la Salud y la Atención (NICE) del Reino Unido recomienda un punto de corte de 10 microgramos de hemoglobina por gramo de heces, lo cual, según un metaanálisis liderado por el doctor Noel Pin de la Universidad de Vigo con más de 70.000 pacientes, indica una alta probabilidad de cáncer colorrectal. Borda añadió que un test con este umbral tiene un alto valor predictivo negativo y la probabilidad de cáncer de colon es solo del 0,5 por ciento, lo que implica que las colonoscopias necesarias pueden no ser urgentes. Sin embargo, si el test resulta positivo, la colonoscopia debería organizarse preferentemente. ‘Elevar este umbral a 20 microgramos apenas reduce la sensibilidad y podría ser una opción en situaciones en que es necesario reducir el número de colonoscopias’, concluyó.