Recientes investigaciones en el ámbito del proyecto Di@bet.es han destacado la función de la proteína surfactante D (SP-D) en la conexión entre el consumo de tabaco y el incremento en el riesgo de sufrir diabetes mellitus tipo 2 (DM2) entre adultos en España.
El análisis, divulgado en ‘Journal of Xenobiotics’ y encabezado por el sector de Diabetes y Enfermedades Metabólicas Asociadas del CIBER (CIBERDEM), indaga si esta proteína inmunológica, liberada en la sangre tras un daño pulmonar, podría mediar los impactos del tabaco y/o la exposición a contaminantes del aire en el desarrollo de la DM2, una patología metabólica de creciente prevalencia mundial.
El estudio abarcó a 2.155 sujetos de la cohorte Di@bet.es, recopilando datos sociodemográficos, clínicos y de estilo de vida, incluyendo el consumo de tabaco y la exposición a contaminantes ambientales. Los niveles de SP-D se midieron vía ELISA y se categorizaron según estuvieran sobre o bajo el percentil 25. La evaluación de DM2 se realizó al comienzo del estudio y después de 7,5 años para examinar la relación con los niveles de SP-D.
Los resultados indicaron que los fumadores tenían niveles más altos de SP-D, con una correlación directa entre el número de cigarrillos consumidos, la duración del hábito y los niveles de esta proteína. Sin embargo, no se hallaron asociaciones significativas entre la mayoría de los contaminantes (PM10, PM2.5, SO2 y CO) y los niveles de SP-D, aunque sí con el NO2.
En esta cohorte, se observó que ni los contaminantes ambientales ni los niveles de SP-D correlacionaban con un mayor riesgo de desarrollar DM2. No obstante, tanto el tabaquismo como los altos niveles de SP-D se vincularon de forma independiente con un incremento en el riesgo de la enfermedad después del seguimiento. Además, el análisis reveló que la SP-D media el 14% del efecto del tabaquismo sobre la incidencia de DM2 en adultos.
«Estos hallazgos apuntan a que la SP-D podría desempeñar un papel relevante en los mecanismos que relacionan el tabaquismo con un mayor riesgo de diabetes tipo 2», afirma el equipo de investigación. «Estos resultados sirven de base para nuevos estudios que nos ayuden a comprender mejor cómo interactúan los factores pulmonares, ambientales y metabólicos», concluyen.
La investigación, con la colaboración de Instituto de Investigación Biomédica de Málaga y Plataforma en Nanomedicina (IBIMA Plataforma BIONAND) y la Universidad de Málaga, aporta una perspectiva más integrada del impacto del tabaquismo en la salud metabólica y plantea nuevas líneas de investigación para avanzar hacia estrategias de prevención más precisas.