Farmaindustria ha expresado este miércoles su contento tras la aprobación de la nueva Agencia Estatal de Salud Pública, al mismo tiempo que ha festejado el reconocimiento a la innovación incremental en medicamentos, una demanda que considera ‘histórica’ para el sector.
La industria farmacéutica celebra la instauración de la Agencia Estatal de Salud Pública (Aesap), un ente que ve como fundamental y que ayudará a que España se equipe mejor ante posibles emergencias de salud futuras, ‘como se puso de manifiesto durante la pandemia de la Covid-19’, enfatiza.
Farmaindustria considera que la Aesap es una ‘buena noticia’ para el Sistema Nacional de Salud y los ciudadanos españoles. Además, reafirma su disposición junto a las compañías farmacéuticas asociadas para colaborar con el Ministerio de Sanidad y las autoridades sanitarias autonómicas, preparando a España para futuras crisis sanitarias.
La organización también manifiesta su compromiso con la investigación y el desarrollo de fármacos que ‘permitan mejorar la salud y la calidad de vida de las personas, así como contribuir a que esos medicamentos lleguen a quienes los necesitan’.
LA INNOVACIÓN INCREMENTAL
Farmaindustria celebra el reconocimiento otorgado por la modificación de la ley vigente del medicamento a la innovación incremental de los medicamentos, que abarca desarrollos adicionales en fármacos ya disponibles, como son nuevas formas de administración o formulaciones, combinación de fármacos, ajustes en la dosificación o en la cantidad de principio activo y nuevos usos de la medicación.
‘Esta era una reivindicación histórica de la industria farmacéutica porque en España no existían incentivos para que las compañías farmacéuticas apostaran por este tipo de innovación, puesto que, como se produce sobre medicamentos ya existentes, la Administración no la estaba valorando como se merece y la condenaba al sistema de precios de referencia, donde las nuevas formulaciones tienen el mismo precio de financiación que las convencionales y se someten a continuas revisiones de precio a la baja’, indica Farmaindustria.
Para la asociación, la ‘falta de consideración’ de los beneficios reales, no sólo clínicos, sobre la innovación incremental representaba un ‘obstáculo’ para el acceso de los pacientes a estos fármacos, ‘especialmente importantes para personas mayores, enfermos crónicos y polimedicados y niños’.
Además, señala que la innovación incremental es una ‘buena opción’ de desarrollo industrial para ciertas compañías farmacéuticas, en su mayoría de capital nacional, ya que permite un desarrollo ‘más rápido y con menos riesgos’ que puede compensar los altos costos y tiempos de la innovación radical, la cual involucra procesos de 8-10 años y más de 2.500 millones de euros de inversión.
‘Por tanto, este reconocimiento tendrá unas consecuencias directas en el tejido innovador y productivo de nuestro país, abriendo también las puertas a la exportación de algunas de estas innovaciones’, comenta.
Finalmente, Farmaindustria recalca que esta ley reconoce una ‘importante’ categoría de medicamentos para muchos pacientes: los denominados medicamentos estratégicos, que son ‘imprescindibles’ desde el punto de vista clínico y ‘vulnerables’ desde la perspectiva del suministro. ‘La nueva norma permite reforzar la protección de estos medicamentos evitando que la continua erosión de precios los lleve a su inviabilidad comercial’, concluye.