La Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA) ha destacado la relevancia de que el Ministerio de Sanidad tenga acceso a la totalidad de los datos de los cribados de cáncer, especialmente tras la negativa de las comunidades gobernadas por el Partido Popular (PP) a facilitar dicha información, alegando posibles usos partidistas en medio de la polémica por los retrasos en las mamografías en Andalucía.
“Lamentamos que los Programas de Detección Precoz de Cáncer de Mama se puedan convertir en instrumento de confrontación social o política, cuando lo que esperamos las mujeres en esta cuestión es la máxima colaboración institucional”, expresó FECMA en un comunicado.
Posteriormente, la federación recalcó que estos datos “no son propiedad de ninguna administración ni de ningún dirigente”, sino que pertenecen al Sistema Nacional de Salud (SNS) y a los pacientes, por lo que negarse a proporcionarlos es “intrumentalizarlos” y “crear dudas y sospechas que no son comprensibles ni aceptables”.
En el comunicado se incluyen detalles como el número de mujeres convocadas a los programas, la cantidad que responde y participa, los tiempos desde la convocatoria hasta la realización de la mamografía, el tiempo de comunicación de los resultados, el porcentaje de mujeres que requieren pruebas adicionales, el número de tumores detectados de inmediato, las recaídas o metástasis y el número de fallecimientos a causa de esta enfermedad.
“No entendemos que el Ministerio de Sanidad no disponga hoy de los datos de esos Programas y por ello no se puedan conocer con precisión sus resultados (…) Solo disponiendo de todos los datos, nuestro Sistema de Salud dispondrá de Registros poblacionales homogéneos y actualizados de cáncer de mama. Disponer de esos datos también ayudaría a mejorar los sistemas de citación de las mujeres a los Programas y los mecanismos de información de los resultados”, añadió la federación.
Por estas razones, la FECMA ha solicitado una reunión urgente del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) para definir claramente los datos que el Ministerio de Sanidad debe manejar, cómo deben ser entregados y en qué plazos.
Además, abogaron por una gestión uniforme de estos programas en todas las comunidades autónomas, respecto a las edades de convocatoria, métodos de lectura e interpretación de las mamografías, y evaluación de la calidad y resultados.
La federación también expresó su preocupación por que esta crisis pueda mermar la confianza en estos programas o que se utilice como “disculpa” para externalizar o privatizar fases de los mismos mediante distintos mecanismos jurídicos o administrativos.
“Las mujeres, todas las mujeres, necesitamos seguir confiando en un correcto funcionamiento en los Programas de Detección Precoz de Cáncer de Mama gestionados por nuestro sistema público de salud”, concluyó el organismo.













