Un 79% de los trabajadores de farmacias cree que el lugar donde laboran muestra escasa o nula digitalización, aunque un 88% está interesado en adquirir nuevas competencias digitales y un 70% está dispuesto a invertir entre una y tres horas semanales para perfeccionar los procesos internos mediante tecnología.
Estos son los hallazgos del primer ‘Informe sobre Digitalización en Farmacias Comunitarias’ elaborado por Media Value, con el respaldo académico de la Universidad Francisco de Vitoria (UFV). La investigación, que involucró a 142 profesionales (94 empleados y 48 propietarios) de 17 comunidades autónomas, muestra que muchos procedimientos internos permanecen en el ámbito manual, causando desánimo, pérdida de tiempo y obstáculos para el crecimiento profesional.
Persistencia de Métodos Tradicionales y Falta de Motivación
Además, el 83 por ciento de los propietarios aún emplea papel, notas escritas a mano o comunicación verbal para gestionar tareas internas. El estudio también señala que la motivación está comprometida: tres de cada cinco empleados admiten no sentirse motivados y un 27 por ciento cuenta con acceso completo a la documentación necesaria para trabajar de manera autónoma.
«Las farmacias están atrapadas en una paradoja: no tienen tiempo para ver cómo ganar tiempo», afirma Alberto Gómez Ureña, CEO de Media Value. Ante este contexto, soluciones como el uso de WhatsApp para coordinar al equipo se han vuelto comunes. El 80 por ciento de los empleados lo emplea como principal medio de comunicación, aunque el 73 por ciento de los propietarios no está al tanto de sus implicaciones legales, especialmente respecto al derecho a la desconexión y la protección de datos confidenciales.
A pesar de estos desafíos, tanto propietarios como empleados están de acuerdo en que la digitalización es una oportunidad. El 85 por ciento de los propietarios considera que mejorar la infraestructura digital de sus farmacias elevaría su imagen profesional y dos de cada tres creen que esto les permitiría brindar un mejor servicio a la comunidad. Por otro lado, el 70 por ciento del personal farmacéutico considera que la tecnología es un impulsor de crecimiento personal y profesional.
El informe concluye que lo que se necesita no es más motivación, sino liderazgo, herramientas adecuadas y un acompañamiento claro para comenzar un proceso de cambio interno.
Finalmente, la digitalización se ve como una oportunidad para mejorar el trabajo, aprender más, ofrecer un mejor servicio sanitario y conectarse de manera más eficiente con laboratorios y proveedores.