Alicia Escuer, directora técnica y de formación de Óptica & Audiología Universitaria, ha alertado sobre los efectos de los cambios hormonales durante la menopausia en la visión, destacando que es un área poco investigada que puede provocar problemas significativos como irritación o visión fluctuante.
Según la experta, la menopausia, una fase biológica crítica en la vida de las mujeres, se asocia con una reducción en los niveles de hormonas como los estrógenos y la progesterona. Esto no solo afecta ginecológicamente, sino que también tiene implicaciones en otras áreas del cuerpo, incluyendo la visión.
«Los cambios hormonales que se producen en la menopausia impactan en la superficie ocular. Disminuye la cantidad de lágrima y se altera su composición, lo que puede generar irritación, visión fluctuante o incluso dificultad para leer o usar pantallas con comodidad durante períodos prolongados», ha detallado Escuer.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que más de 1.200 millones de mujeres a nivel global habrán llegado a la menopausia para 2030, y la mayoría experimentará síntomas oculares sin estar completamente conscientes de ello. Entre los síntomas más frecuentes se encuentran la sequedad, visión borrosa, enrojecimiento, picor y mayor sensibilidad a la luz, principalmente debido al síndrome del ojo seco que es más común en mujeres mayores de 45 años.
TRATAMIENTOS
Ante estos desafíos, Escuer recomienda un enfoque integral que no solo se centre en la hidratación ocular, sino que también incluya un análisis personalizado de cada paciente. «No se trata solo de hidratar el ojo. Hay que estudiar cada caso, entender cómo afecta la actividad diaria y adaptar soluciones que mejoren el confort visual de cada mujer», ha precisado.
Además de la hidratación ocular con productos especializados, en Óptica & Audiología Universitaria también se sugiere el uso de filtros solares que protejan de los rayos UV y otros factores externos. También se recomienda el uso de lentes diseñadas para aumentar la comodidad al leer, trabajar o conducir en condiciones de poca luz.
En conclusión, es crucial abordar la salud ocular durante la menopausia con un enfoque experto, sensible y preventivo, lo que puede significar la diferencia entre vivir esta etapa con molestias o con una mayor calidad de vida.














