La pediatra Silvina Natalini Martínez, especialista adjunta en HM Puerta del Sur, subraya que la incorporación del anticuerpo monoclonal nirsevimab como profilaxis en lactantes frente al virus respiratorio sincitial (VRS) ha logrado disminuir de forma muy significativa los casos de bronquiolitis en este grupo de edad y los ingresos hospitalarios asociados, un avance que considera un auténtico hito.
“Esto ha permitido evitar el colapso de las UCIs pediátricas que veníamos sufriendo cada invierno”, ha explicado la doctora Natalini, directora de la Unidad de Investigación de Vacunas de la Fundación de Investigación HM Hospitales (FiHM), recordando que el VRS es el principal responsable de la bronquiolitis grave en menores de seis meses.
Los ensayos clínicos ya habían demostrado que nirsevimab contribuía a que muchos lactantes no desarrollaran la infección durante su primer año de vida. En la práctica clínica habitual, la especialista detalla que la protección frente a los ingresos hospitalarios supera actualmente el 80 por ciento, lo que consolida esta intervención como un avance de referencia en pediatría.
Proyecciones realizadas en Estados Unidos apuntan a que, si aproximadamente la mitad de los recién nacidos recibiera nirsevimab, cada año se podrían evitar más de 100.000 consultas en Atención Primaria, más de 38.000 visitas a Urgencias y más de 14.000 hospitalizaciones vinculadas al VRS.
De la bronquiolitis al protagonismo de la gripe
Natalini indica que la generalización de este anticuerpo ha contribuido a reducir el peso del VRS esta temporada, cediendo terreno a la gripe. “Actualmente la gripe es el virus respiratorio más frecuente en niños. Esta temporada ha llegado unas cuatro semanas antes que en años previos y estamos viendo el pico más alto de los últimos cinco años”, ha aseverado.
El adelanto de la circulación gripal se relaciona con la expansión de la variante K del virus de la gripe A(H3N2). “Se trata de un cambio genético del virus que reduce nuestra inmunidad previa y facilita un mayor contagio”, ha explicado la especialista. Además, ha señalado que la vacuna se formuló antes de la aparición de esta variante, lo que ha provocado un desajuste frente a esta cepa en concreto.
La pediatra incide en que los niños de menor edad son los que presentan mayor riesgo, por lo que insta a las familias a vigilar de forma especial la dificultad respiratoria, un signo que siempre requiere valoración médica. En presencia de fiebre, recomienda revisar la evolución cada 48 horas para identificar posibles complicaciones de forma temprana.
También sugiere extremar las medidas de precaución en encuentros familiares y sociales, ya que los espacios cerrados facilitan la propagación de los virus respiratorios. Si se manifiestan síntomas compatibles con una infección respiratoria, lo más prudente es limitar el contacto con otras personas.
Aunque la gripe se mantiene como el virus predominante en este invierno, los expertos anticipan un cambio gradual en el patrón de circulación. Según expone Natalini, cuando la curva de la gripe inicie su descenso, volverán a ganar presencia el VRS y otros patógenos respiratorios, por lo que se prevé un repunte de infecciones por VRS en niños de entre seis meses y tres años, así como en personas mayores, un colectivo clave por su estrecha convivencia con los más pequeños.