Un consorcio de investigadores de diversas partes del mundo ha lanzado ‘NeuMap’, un atlas pionero que desvela la estructura completa de los neutrófilos, que son las células más numerosas del sistema inmune y actúan como la primera barrera ante infecciones o lesiones. Este trabajo muestra cómo se adaptan estas células para proteger y recuperar la salud del organismo.
Hasta la fecha, el entendimiento sobre el funcionamiento de los neutrófilos era limitado, especialmente en cómo varían según el tejido donde se encuentren y su contribución en la defensa y en patologías como inflamaciones, enfermedades cardiovasculares o cáncer. Se ha descubierto que, aunque son cruciales para combatir infecciones, también pueden intensificar la inflamación en situaciones como la COVID-19.
El proyecto, liderado por instituciones como el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), la Universidad Carlos III de Madrid, la Universidad de Yale y la Universidad Westlake, ha culminado en la creación de ‘NeuMap’, el primer mapa detallado que explica la organización de los neutrófilos a través de diferentes tejidos y etapas de la vida.
Publicado en ‘Nature’, el estudio analizó más de un millón de células usando tecnología de secuenciación avanzada. «Lo más sorprendente es que cada neutrófilo vive apenas unas horas, pero juntos mantienen una arquitectura estable durante toda la vida. Es un patrón que emerge del caos. Comprender esta lógica abre nuevas vías para aprender a guiar la inmunidad hacia la curación», explicó Iván Ballesteros, investigador del CNIC.
Este trabajo también destaca que la falta de referencias claras había restringido hasta ahora la capacidad de entender el verdadero rol de estas células. Los estudios anteriores se centraban en enfermedades específicas, pero este nuevo enfoque permite ver cómo los neutrófilos funcionan bajo una amplia variedad de condiciones, observando patrones comunes a pesar de su diversidad, según destacó Daniela Cerezo-Wallis, investigadora en la Universidad de Yale.
Además, ‘NeuMap’ se convierte en una herramienta práctica y accesible que ayudará a la comunidad científica a identificar los tipos de neutrófilos presentes en distintas enfermedades y a entender su posible función, transformando un campo que tradicionalmente ha sido fragmentado y acelerando el desarrollo de nuevos biomarcadores y terapias.
