Un estudio internacional liderado por la Universidad Hebrea de Jerusalén ha descubierto que las personas con discapacidad tienen una menor probabilidad de recibir cuidados oculares y dentales.
Según la investigación, publicada en ‘Journal of Public Health’, se analizaron los datos de casi 47.000 adultos de 27 países con ingresos medios y altos, obtenidos a través de la encuesta SHARE. Los investigadores aplicaron un modelo estadístico multinivel para evaluar el impacto del nivel de discapacidad y la financiación de la salud en la adopción de medidas preventivas de salud.
Los resultados mostraron variaciones significativas en las tasas de inmunización contra la gripe, las revisiones de la vista y la atención dental. Por ejemplo, las tasas de vacunación contra la gripe oscilaron entre el 3% y el 60%, y las revisiones oculares entre el 17% y el 77%.
El estudio también reveló que, aunque en los países con altos niveles de inversión en salud pública la situación general es mejor, la diferencia en la atención entre personas con y sin discapacidad se mantiene constante en términos de cuidado oftalmológico y dental. No obstante, la vacunación contra la gripe presentó un panorama diferente: en naciones con un gasto de salud superior, no solo aumentaron las tasas de vacunación entre todos los ciudadanos, sino que la brecha se redujo e incluso se invirtió al alcanzar un gasto del 8.8% del PIB, con las personas con discapacidad recibiendo más vacunas que las sin discapacidad.
Por tanto, los resultados indican que la discapacidad continúa siendo un obstáculo para el acceso a la atención preventiva en muchos lugares, aunque un mayor gasto en salud pública puede mejorar el acceso a servicios esenciales como vacunas, revisiones dentales y cuidado ocular.