El responsable de la Cartera Común de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia del Ministerio de Sanidad, César Hernández, ha confirmado recientemente que la Ley de Medicamentos y Productos Sanitarios será reintroducida en el Consejo de Ministros en una segunda lectura antes de terminar 2025.
“Los otros ministerios ya conocen cuál es la orientación final que tiene”, destacó Hernández en su participación en el evento ‘¿Cómo garantizar el acceso a medicamentos para salvar vidas?’, organizado por Viatris y Europa Press, añadiendo que aún se requieren ciertos ajustes en el texto.
El Consejo de Ministros ya había dado el visto bueno al borrador inicial en abril. Este incluía medidas como la posibilidad de que enfermeras y fisioterapeutas prescriban medicamentos dentro de sus competencias, la facultad de los farmacéuticos para sustituir un fármaco por otro en caso de falta de suministro y una revisión del sistema de precios de referencia para crear un modelo de mercado más competitivo, entre otros cambios.
Después de esta aprobación, el anteproyecto se sometió a una consulta pública que atrajo alrededor de 400 alegaciones, aunque desde el Ministerio de Sanidad se aclaró que muchas eran repetitivas.
Anteriormente, la ministra de Sanidad, Mónica García, había manifestado su esperanza de reintroducir la ley en septiembre para su aprobación como proyecto de ley, pero la cantidad de alegaciones obligó a posponer este proceso.
SISTEMA DE PRECIOS DINÁMICOS
Hernández defendió en el encuentro de Viatris y Europa Press uno de los elementos clave de la futura Ley del Medicamento, el sistema de precios dinámicos, que reemplaza al sistema de precios seleccionados del borrador inicial y que fue objeto de críticas significativas por parte de la industria.
Explicó que este nuevo sistema permitiría una competencia más ágil en el mercado de medicamentos una vez finalizada la protección de la patente, lo que contribuiría a que los pacientes accedan a tratamientos esenciales a precios reducidos y se mitiguen los problemas de desabastecimiento.
“Lo que proponemos es que haya un mercado vivo de competencia, que no erosione el precio hasta un punto que haga imposible ese mantenimiento”, enfatizó.