En un reciente encuentro en Polokwane, Sudáfrica, los ministros de Salud del G20 han emitido una declaración conjunta en la que urgen a mejorar el acceso a los tratamientos antirretrovirales de larga duración para combatir el VIH. Este llamamiento se enmarca en un esfuerzo por mitigar las desigualdades en salud y hacer frente a las pandemias de manera más efectiva.
La declaración es resultado de la cumbre ministerial sobre Salud del G20 y responde a las preocupaciones expresadas en un informe del Consejo Mundial sobre Desigualdad, Sida y Pandemias de ONUSIDA, que destacó cómo las desigualdades incrementan la vulnerabilidad ante pandemias, creando un círculo vicioso que solo puede romperse con medidas concretas y efectivas.
Los ministros han propuesto una serie de medidas estratégicas, como asegurar el acceso a medicamentos esenciales y abordar factores económicos como la deuda elevada que vulnerabiliza países. Winnie Byanyima de ONUSIDA y el economista Joseph E. Stiglitz han destacado la importancia de eliminar barreras para el acceso a tecnología médica en el sur global. ‘Los virus no entienden de pasaportes ni visados’, ha afirmado Stiglitz.










