El Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP) ha advertido que esta enfermedad sigue siendo la más letal, con 23.239 muertes previstas para 2024, un incremento del 1,9% respecto al año anterior. A pesar de los avances, solo tres de cada diez afectados logran superar los cinco años tras el diagnóstico, aunque la supervivencia ha aumentado un 12% en los últimos diez años gracias a la investigación y las innovaciones terapéuticas.
Con la celebración del Día Mundial del Cáncer de Pulmón, se ha presentado la campaña ‘Datografía del cáncer de pulmón’, una iniciativa que pretende visualizar y cuantificar el impacto social de esta patología en España. Este proyecto se sustenta en el Registro de Tumores Torácicos (RTT) del GECP, que recopila datos clínicos y demográficos de más de 40.000 pacientes, constituyéndose en la mayor base de datos sobre esta enfermedad en España y una de las principales en Europa.
Desde el GECP se ha puesto especial atención en el aumento de la mortalidad por este cáncer, especialmente entre las mujeres, aunque sigue predominando en hombres. De los 32.610 pacientes con cáncer de pulmón no microcítico (CPNM) en el registro, el 72,2% son hombres y el 27,8% mujeres. ‘Aunque el perfil masculino sigue predominando, la incidencia femenina continúa en aumento, especialmente en mujeres jóvenes no fumadoras con tumores de tipo adenocarcinoma o con mutaciones genómicas tratables’, explica el doctor Mariano Provencio, presidente del GECP, quien aboga por ‘implementar estrategias dirigidas a frenar este avance’.
El rango de edad más común para el diagnóstico se sitúa entre los 60 y 70 años (34,3%), seguido por el grupo de 70 a 80 años (28,2%). Sin embargo, el 5% de los casos se detecta antes de los 50 años, destacando la importancia de las medidas de prevención y detección temprana. ‘Estamos viendo un incremento de diagnósticos de cáncer de pulmón en personas más jóvenes, algo especialmente preocupante porque rompe con el patrón clásico de una enfermedad asociada a edades avanzadas’, subraya Provencio.
Además, más de la mitad de los diagnósticos (56%) se realizan en estados avanzados (III o IV), donde las posibilidades de curación son menores. ‘Estos datos ponen de relieve la necesidad de un plan nacional integral que sitúe al cáncer de pulmón como una prioridad dentro de la estrategia sanitaria del país’, indica Bartomeu Massuti, secretario del GECP, quien recuerda que el tabaquismo sigue siendo una causa directa de la enfermedad.
En cuanto a los avances, las terapias dirigidas y la inmunoterapia han cambiado radicalmente el pronóstico de este tumor en etapas avanzadas, y las nuevas estrategias de tratamiento preoperatorias han logrado altas tasas de respuesta y supervivencia en estados iniciales. Sin embargo, desde el GECP se resalta que solo el 4% de la inversión pública en cáncer se destina a esta enfermedad, pese a ser la más mortal. ‘Invertir en investigación no es una opción, es una necesidad. Cada nuevo estudio clínico abre una puerta a tratamientos más efectivos y a diagnósticos más tempranos. La infrafinanciación frena los avances en diagnóstico precoz y medicina personalizada en cáncer de pulmón’, señala el secretario del GECP.