La Comisión de Políticas Integrales de Discapacidad del Senado ha dado su visto bueno de manera unánime a una propuesta del PP que busca garantizar la inclusión en el ámbito laboral de quienes sufren discapacidades debido a cardiopatías congénitas.
«Los pacientes con cardiopatías congénitas se enfrentan en muchas ocasiones a la incomprensión, al tratarse de una enfermedad que no se aprecia a simple vista», ha indicado el portavoz de Sanidad del Grupo Popular, Enrique García Escudero, que ha defendido la iniciativa.
El representante del PP en el Senado también ha hecho un llamado al Gobierno para «reconocer adecuadamente las secuelas que producen las cardiopatías congénitas, su impacto en el día a día y en el proceso de evaluación de la discapacidad».
«Las consecuencias a las que se enfrentan los enfermos de cardiopatía congénita pueden ser muchas, como arritmias; coágulos de sangre; trastornos y demoras en el desarrollo: trastornos endocrinos; insuficiencia cardiaca; enfermedad renal o hepática; hipertensión pulmonar; o accidente cerebrovascular», ha resaltado Ruiz Escudero.
Además, la moción incluye un punto que exhorta al Gobierno, en colaboración con las comunidades autónomas, a «garantizar a los niños y niñas con cardiopatías congénitas el acceso a una atención temprana desde el nacimiento».
«Es necesario proporcionar una adecuada transición a las Unidades de Cardiopatías congénitas de adulto, así como el acceso al resto de servicios de salud», ha indicado Ruiz Escudero, quien ha añadido que ha demandado al Ejecutivo «campañas de concienciación, sensibilización social e investigación de las cardiopatías congénitas».