La Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC) ha emitido una advertencia sobre el daño considerable que las perforaciones nasales, ocasionadas por el consumo de cocaína, pueden causar. Estas lesiones resultan ser más amplias y destructivas en comparación con las originadas por otras causas.
Recientemente, un estudio español que ha sido aceptado para su publicación en ‘European Archives of Oto-Rhino-Laryngology’ ha evidenciado que las perforaciones septales inducidas por cocaína son notablemente más grandes, más destructivas, presentan más síntomas y tienen un mayor impacto emocional que las causadas por otros factores como cirugías previas o traumatismos.
La SEORL-CCC ha reaccionado tras la aparición de un vídeo en ‘TikTok’ de Paris Jackson, donde muestra una perforación en su tabique nasal. Ante este hecho, la Sociedad ha decidido enfocarse en este problema que, aseguran, es cada vez más frecuente entre los jóvenes y más común en las consultas de otorrinolaringología.
El análisis realizado en el Hospital Clínic y el Centro Médico Teknon en Barcelona, entre 2017 y 2024, ha examinado 152 casos de perforaciones septales, con 57 de ellos directamente relacionados con el uso recreativo de cocaína. Este estudio se considera uno de los más extensos en esta área específica, destacando su importancia.
Los pacientes con perforaciones por cocaína experimentan síntomas más severos como rinorrea intensa, obstrucción nasal y formación de costras, afectando significativamente su calidad de vida. Los resultados de cuestionarios como el SNOT-22 y el SF-36 indican una peor calidad de vida y estado de salud mental en estos pacientes.
El componente psicológico también es significativo, con una alta incidencia de comorbilidad psiquiátrica y un impacto notable en la autoimagen y el estado emocional. El estudio subraya la importancia de un enfoque integral para el tratamiento, que incluya otorrinolaringología, manejo de la adicción y, si es necesario, atención en salud mental.