Santos Cerdán, ex secretario de Organización del PSOE, sostuvo el lunes pasado ante el magistrado del ‘caso Koldo’ en el Tribunal Supremo que él y el partido no habían cometido delitos financieros, al mismo tiempo que se declaró como blanco de una ‘persecución política’. «Me considero inocente y quiero dejar claro que yo no me he llevado ni un euro, ni el Partido Socialista tampoco», expresó durante su declaración, tras la cual fue enviado a prisión provisional acusado de pertenecer a una organización criminal y otros delitos.
Cerdán aseguró no haber incrementado su patrimonio ilegalmente, mencionando que sigue viviendo en la misma casa de protección oficial que adquirió en 1995 por 11 millones de pesetas y por la cual aún continúa pagando tras las reformas de 2005. Ante la pregunta de su abogado sobre la razón de su imputación, respondió que era por su rol en la formación de «gobiernos progresistas en España» desde la moción de censura que posicionó a Pedro Sánchez en el poder.
En el contexto político, recordó que tras la presentación de los Presupuestos Generales del Estado por el gobierno de Mariano Rajoy con apoyo del PNV, Sánchez le instruyó: «Con el PNV solo habla Santi». Semanas después, Cerdán anunciaba a Sánchez su próxima presidencia. Además, admitió haber utilizado a Antxón Alonso para facilitar conversaciones políticas, aunque negó cualquier vínculo formal con la empresa Servinabar, a pesar de un contrato encontrado en posesión de Alonso.
En cuanto a su mudanza a Madrid en 2017, compartió un pequeño apartamento con Alonso, pero negó gestiones a favor de Servinabar dado que el PSOE estaba entonces en la oposición. También destacó su papel en la investidura de Sánchez en 2023, implicándose en diálogos con partidos catalanes, y sugirió que Félix Bolaños podría ser el siguiente ‘objetivo’ debido al descontento de ciertos poderes con los gobiernos de izquierda.
Por último, habló de su relación con el ex ministro José Luis Ábalos y con Koldo García, a quien valoró por su voluntariado en un contexto difícil en Navarra, rechazando cualquier actuación en favor de su designación como asesor en Transportes.
