Este lunes, 17 de noviembre, tres adolescentes implicadas en un caso de acoso escolar relacionado con Sandra Peña, la joven de Sevilla que se quitó la vida en octubre, serán interrogadas por la Fiscalía de Menores de Sevilla. La joven habría sido víctima de bullying antes de su trágico fallecimiento.
Anteriormente, el miércoles 12 de noviembre, los padres de Sandra ya habían comparecido ante la misma fiscalía como testigos afectados. Durante una reunión que duró aproximadamente cuatro horas, solicitaron una sanción severa y ejemplar para el colegio Irladensas de Loreto, lugar donde estudiaba su hija.
En esa misma jornada, también estaban citados varios miembros del personal del colegio, incluidos el director, la jefa de estudios, la orientadora y la tutora de Sandra, quienes optaron por no hacer declaraciones a la prensa.
Isaac Villar, tío de Sandra y portavoz de la familia, compartió que los padres asistieron al encuentro con la esperanza de esclarecer los hechos y expresó el apoyo recibido por parte de la Junta de Andalucía y el Defensor del Pueblo. La familia espera una respuesta firme de las autoridades en los procedimientos administrativos relacionados con el caso.
La familia de Sandra considera que la única sanción justa es la más severa, dada la gravedad de los errores en la gestión del centro que, según ellos, llevaron a Sandra a tomar la decisión de suicidarse. Subrayan la importancia de que estos hechos no se repitan.
La investigación sigue en curso, con la Policía Nacional habiendo entregado un informe detallado sobre el acoso que Sandra sufrió. Actualmente, la Fiscalía gestiona dos expedientes, uno centrado en la implicación de las menores y otro que evalúa la responsabilidad del personal del colegio.
