Este martes, los expertos José Cabrera, psiquiatra, y José Capote, psicólogo, que redactaron informes médicos sobre la actriz Elisa Mouliaá a su solicitud, se presentarán ante el juez encargado de la investigación contra Íñigo Errejón por un supuesto delito de agresión sexual.
Desde las 11.00 horas, el juez Adolfo Carretero espera a ambos especialistas para que confirmen los informes presentados en el proceso, los cuales indican que Mouliaá sufrió un ‘abuso (…) imprevisto e injustificado’ y ‘un verdadero atentado contra su intimidad’ por parte de Errejón.
En uno de los documentos, de 20 páginas, a los que tuvo acceso Europa Press, el perito José Cabrera determinó que la actriz desarrolló un ‘trastorno por estrés postraumático’ que, como detalla, es ‘impredecible’ y podría resultar en una ‘secuela permanente’.
‘La paciente en un contexto determinado vivenció una situación de ‘abuso’ por parte de su entonces compañero ocasional y denunciado, que significó en su psique un verdadero atentado contra su intimidad’, señaló el experto, quien entrevistó a la actriz en varias ocasiones entre enero y febrero de este año y revisó documentación del caso.
La defensa de la actriz considera que estos informes serán ‘determinantes para esclarecer el estado psicológico de la actriz durante los acontecimientos investigados en un proceso que ha generado un notable interés mediático’.
LOS ÚLTIMOS TESTIGOS
Tras la declaración del 20 de junio de Soraya, una organizadora de la fiesta donde supuestamente Errejón cometió el delito, quien afirmó ante el juez que Mouliaá ‘llegó a decirle que lo que había pasado’ con el exlíder ‘no era un delito’ en el momento del suceso.
Soraya reveló que Mouliaá hizo esa declaración en un audio solicitado por el juez. La actriz decidió denunciar tras informarse y ver casos similares, considerando que los hechos podrían ser sancionados bajo la ley del ‘solo sí es sí’ y que ‘se veía en el deber moral’ de hacerlo ‘por motivos altruistas’.
El mismo 20 de junio, el juez también escuchó al otro organizador del evento, Borja, residente en Australia, quien cortó lazos con Mouliaá tras su divorcio de un amigo común.
Borja contactó con Errejón por correo electrónico tras la denuncia porque le parecía injusta la acusación. ‘¿Cuál es el plan con el juicio?’, le preguntó al exdiputado, interesado en ‘información de lo que ocurría a nivel práctico’.
Según el testimonio de Borja, no percibió a Mouliaá particularmente afectada esa noche y afirmó que habría notado si Errejón la hubiera tomado del brazo en el pasillo. ‘No vi nada fuera de lo normal’, enfatizó, agregando que en la casa no había pestillos.
Un tercer testigo, Hugo, presente en la fiesta, no recordó ver a la actriz bebiendo especialmente y describió su comportamiento como ‘normal’ cuando se fueron. Mouliaá le había enviado algún mensaje que él ignoró.