QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
Este jueves, el Congreso de los Diputados someterá a evaluación la capacidad y méritos de Teresa Peramato para ocupar el puesto de fiscal general del Estado, tomando el relevo de Álvaro García Ortiz, quien dejó su cargo tras ser condenado a dos años de inhabilitación por un delito de revelación de secretos contra Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
La intervención de Peramato ante la Comisión de Justicia de la Cámara Baja es un procedimiento obligatorio establecido por el Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal (EOMF) en su artículo 29, aunque no es determinante para su nombramiento. Esta sesión se organiza después de que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) emitiera su opinión favorable el pasado 26 de noviembre.
“Reúne los méritos y requisitos para ser nombrada fiscal general del Estado”, afirmaron los vocales del Pleno, tanto progresistas como conservadores, en una sesión que duró apenas quince minutos, de acuerdo con fuentes de dicho órgano citadas por Europa Press.
LOS REQUISITOS A EVALUAR
Para ser líder de la Fiscalía se requiere ser un jurista español de renombrado prestigio con al menos quince años de ejercicio profesional. Peramato cuenta con 35 años de trayectoria y es especialmente reconocida por su lucha contra la violencia de género y su ideología progresista.
Además, el Estatuto prohíbe que se proponga a alguien para el cargo si ha ocupado posiciones de alto rango en el gobierno, como Ministro, Secretario de Estado o Consejero de un Gobierno autonómico, en los cinco años anteriores. Peramato no ha ocupado ningún cargo público en ese periodo.
Asimismo, el Estatuto establece que no se puede proponer a alguien que haya sido elegido presidente de una corporación local o haya sido miembro del Parlamento en los últimos cinco años. Peramato cumple también con este requisito.
EL TENSO EXAMEN A GARCÍA ORTIZ
La última revisión de la idoneidad de un fiscal general ocurrió hace casi dos años, el 21 de diciembre de 2023, cuando el Congreso discutió la reelección de García Ortiz. El debate estuvo marcado por críticas severas de varios partidos, pero especialmente del PP y Vox, quienes cuestionaron la imparcialidad de García Ortiz para el cargo.
En esta ocasión, el PP ha expresado su ‘cautela’ respecto al nombramiento de Peramato. Miguel Tellado, secretario general del PP, destacó que lo crucial no es quién es nombrado sino por quién. Santiago Abascal, líder de Vox, también mostró su escepticismo sobre la independencia de Peramato en su potencial rol.
Una vez que Peramato sea aprobada por el Congreso, podrá ser propuesta oficialmente para el cargo y jurará su posición ante el Rey, asumiendo un mandato de cuatro años. Durante su gestión, solo podrá ser destituida por motivos específicos detallados en el Estatuto Fiscal.
De confirmarse, Peramato sería la cuarta persona designada para dirigir la Fiscalía General del Estado durante la presidencia de Pedro Sánchez.
