Irídia – Centre per la Defensa dels Drets Humans ha interpuesto una denuncia en la Audiencia de Barcelona contra dos agentes de civil por un presunto ataque homófobo hacia un hombre de 40 años, ocurrido en el barrio del Raval en diciembre de 2020.
Irídia los responsabiliza de presuntas lesiones y torturas con agravante de discriminación por orientación sexual, solicitando penas que alcanzan los 6 años de prisión, 12 de inhabilitación y una compensación de 17.327 euros, declarando a la Generalitat como responsable civil subsidiaria.
De acuerdo con la denuncia, durante la madrugada del 26 de diciembre los oficiales interceptaron al hombre sin presentarse, lo agredieron físicamente, le dirigieron expresiones homófobas y le confiscaron el teléfono, según comunicó Irídia este martes.
El informe revela que la supuesta víctima solicitó ayuda en el instante de los eventos, pero no obtuvo apoyo del equipo uniformado que llegó posteriormente, siendo detenido sin explicación de las razones o la lectura de sus derechos.
LESIONES FÍSICAS Y PSICOLÓGICAS
La acusación detalla que los policías retuvieron al afectado mediante una ‘coerción física’ contra una pared mientras le despojaban de su móvil y mochila, haciéndole creer que estaba siendo robado.
Posteriormente, los agentes le informaron que eran policías pero sin mostrar identificación. Mientras uno lo sujetaba contra la pared, el otro le propinó un golpe en el rostro y, tras caer, le golpearon con la porra en su pierna izquierda, según la acusación.
Además, lo asfixiaron al tomarlo del cuello y presionar ‘muy fuerte’, causándole una intensa sensación de asfixia, y continuaron golpeándolo en las piernas y la cabeza.
MOSSOS
Según los Mossos, los hechos tuvieron lugar a las 4.30, en un periodo donde la movilidad estaba restringida por la pandemia de la Covid-19, en una calle donde vigilaban un ‘narcopiso’ del Raval que causaba molestias. Cuando le solicitaron que se detuviera, intentó huir y, al tratar de contenerlo, ‘golpeó muy agitado’ a los oficiales.
Fuentes policiales informaron a Europa Press que la detención se efectuó por un supuesto atentado a agentes de la autoridad, y en ese momento no se constató ninguna conducta irregular.
Por este motivo, no se inició ninguna investigación reservada ni procedimiento interno, y las mismas fuentes aseguran que todas las denuncias por hechos penales derivadas de actuaciones policiales irregulares ‘se investigan siempre’.