El Instituto de Medicina Legal ha emitido el informe definitivo sobre la autopsia de un nonagenario que perdió la vida en diciembre de 2023, atribuyendo su muerte a una intoxicación provocada por la ingesta de tranquilizantes y narcóticos. Estos compuestos, aparentemente administrados de manera “intencional” por una mujer que se hacía pasar por cuidadora, han sido identificados específicamente como benzodiacepinas y metadona.
De acuerdo con los análisis forenses, la víctima fue expuesta a estos medicamentos a pesar de no tener acceso previo a ellos, ya que no eran parte de ningún tratamiento médico prescrito. Este hecho fue crucial para determinar la causa de la muerte del hombre, quien enfrentó serias complicaciones médicas que finalmente lo llevaron a fallecer en el Hospital Universitario Torrecárdenas, tres semanas después de ser ingresado.
Las investigaciones judiciales, apoyadas por las pruebas recabadas, sugieren que la mujer tenía la intención de intoxicar a la víctima para robarle. Ingresó en prisión provisional acusada de múltiples delitos, incluyendo robo y homicidio, y se investiga también por posesión ilícita de armas. La familia del fallecido había expresado sospechas sobre la causa de la muerte desde el principio, lo que se vio reforzado por casos similares en la zona.
La sospechosa, que atacó entre marzo y noviembre de 2023, seleccionaba a ancianos vulnerables en Almería, presentándose como cuidadora o empleada doméstica. Una vez dentro de sus domicilios, supuestamente les administraba sedantes para incapacitarlos y robarles. En total, se estima que sustrajo más de 15.000 euros y diversas joyas, dejando a sus víctimas en grave estado de salud.
El caso continúa bajo investigación, habiendo motivado registros en la vivienda de la acusada donde se encontraron objetos y medicamentos relacionados con los delitos.