La Audiencia Provincial de Madrid ha dictado sentencia exculpatoria para un médico, quien dirigía el Área de Sanidad de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, por las acusaciones de acoso sexual y agresión sexual hacia una agente en el año 2017 en las instalaciones de la policía.
La resolución judicial, a la que tuvo acceso Europa Press, se basa en el principio ‘in dubio pro reo’ debido a que “ninguno de los seis testigos que depusieron en el juicio ofrecieron elementos corroboradores de la denuncia”.
El fiscal había pedido cuatro años de prisión para el acusado por un delito de acoso sexual y otro de agresión sexual. Según el escrito de acusación del fiscal, aunque no se ha demostrado, el acusado mantenía un comportamiento amistoso marcado por frases como “aquí las chicas que vienen, si responden y se portan bien, yo las coloco luego donde sea”, señalando su influencia dentro de la Jefatura.
La relación entre el acusado y la agente, que comenzó su servicio en esta unidad en 2017 a los 38 años, se caracterizó inicialmente por gestos de cortesía que se intensificaron progresivamente, generando incomodidad en la agente. Desde un inicio, el acusado le ofrecía masajes no solicitados utilizando como excusa un antiguo problema lumbar de la agente, llegando incluso a situaciones más invasivas y comentarios inapropiados.
Con una periodicidad de dos veces por semana, el médico requería la presencia de la agente en su despacho, llegando a realizar gestos físicos y comentarios que la dejaban en un estado de intimidación y ansiedad. Además, en una ocasión, mientras usaba el coche oficial, el acusado colocó su mano sobre la ingle de la funcionaria, lo que aumentó la tensión durante el trayecto sin que ella pudiera reaccionar.