Este jueves, un magistrado de la Audiencia Nacional (AN) encargado del ‘caso Koldo’, tomará declaración a Virginia Barbancho, quien fuera directiva en Tragsatec y que reveló ante el Senado presiones por parte de Adif e ‘irregularidades’ vinculadas a Jésica Rodríguez, excompañera sentimental del anterior ministro de Transportes, José Luis Ábalos.
Originalmente programada para el 21 de julio, la fecha de la declaración fue modificada por Ismael Moreno, el juez instructor, tras ser informado por Barbancho de un compromiso de viaje previo.
Barbancho ya había testificado el 23 de mayo en una comisión del Senado investigando una presunta red de corrupción, donde afirmó haber observado ‘irregularidades’ en las labores de la expareja de Ábalos y señaló haber recibido instrucciones de Adif, cliente del proyecto, para ignorarlas.
‘Me mandaron callar’, declaró Barbancho, añadiendo que, aunque no podía confirmar que Rodríguez no trabajara, sí notó que no registraba su asistencia. ‘Tenía elementos que no me gustaban nada’, concluyó.
Barbancho también mencionó que, aunque no pudo confirmar totalmente las irregularidades, sí informó a Ignacio Zaldívar, entonces director de Gestión Administrativa en Adif, quien presuntamente le instruyó a ignorar la situación.
Según detalló, Zaldívar solo transmitía un mensaje que provenía directamente de la presidencia de Adif, dirigida por Isabel Pardo de Vera en ese entonces.
LA ‘SOBRINA’
En su testimonio ante el Senado, Barbancho reconoció que parte de su función era supervisar a Rodríguez. ‘Sí que era mi obligación, cumplí con mi obligación. Y cuando veo que en otros sitios no lo hicieron, pues yo al menos tengo cierto orgullo de decir que yo sí lo hice. Yo apreté, apreté hasta el punto que lo que pasó fue que me riñeron, hasta ese punto’, resaltó.
Aclaró que no tuvo participación en la contratación de Rodríguez, pero le habían mencionado que llegaba recomendada por el entonces ministro de Transportes, refiriéndose a ella como ‘sobrina’ y no como ‘escort’.
Barbancho implementó un sistema de fichaje que Rodríguez esquivó por varias semanas. ‘Empiezo a tener un problema con una trabajadora, empiezo a ver que la trabajadora no ficha, empiezo a ver que se me escaquea y que no tengo control sobre ella y se lo digo a mi gerente y no hace nada. Para colmo, el cliente lo que hace es decirme que la deje en paz y se me sigue diciendo que mire para otro lado y que haga la vista gorda’, lamentó.
Isabel Pardo de Vera y Javier Herrero, quienes ocuparon cargos de alto nivel en Adif y en la Dirección General de Carreteras respectivamente, están citados a declarar el próximo lunes, pero en calidad de imputados.