El tribunal penal número 22 de la Audiencia de Barcelona ha declarado la inocencia de 19 de los 21 acusados en los incidentes ocurridos durante el desalojo del Bloc Llavors en el barrio de Poble-sec en mayo de 2021, quienes enfrentaban cargos por daños y por agresión y resistencia a la autoridad.
La sentencia, que fue revisada por Europa Press, señala que solamente dos de los manifestantes han sido encontrados como ‘autores criminalmente responsables’ de un delito de resistencia grave a la autoridad, imponiéndoles una multa de seis meses con una tarifa diaria de 6 euros y una responsabilidad personal subsidiaria en caso de no efectuar el pago.
Desde 2017, seis familias residían en el Bloc Llavors, el cual fue evacuado definitivamente en mayo de 2021 después de cinco intentos previos. En febrero de 2022, cuatro individuos fueron arrestados por los Mossos d’Esquadra por supuesta relación con los disturbios durante la acción policial.
PRUEBAS INSUFICIENTES
El magistrado concluyó, después de evaluar las pruebas documentales videográficas, que era ‘la imposibilidad de valorar las documentales videográficas –cualquiera que sea su forma de presentación– como prueba de cargo’, según las palabras textuales del documento.
Además, aunque los acusados estuvieron presentes durante la protesta, el juez señaló que no se pudo determinar con precisión cuántas y qué personas cometieron los delitos.
LANZAMIENTO DE OBJETOS
La decisión judicial confirmó que algunos de los acusados participaron en la protesta, creando barreras humanas y haciendo uso de objetos como vallas y colchones para obstruir la acción judicial y policial.
Si bien se confirmó el lanzamiento de objetos y algunos empujones, así como lesiones a cuatro agentes de los Mossos, el juez indicó que ‘sin que haya quedado acreditado la participación de los acusados en la producción de dichas lesiones’.
4 AGENTES HERIDOS
En el evento, cuatro agentes de la policía catalana sufrieron lesiones, incluyendo contusiones en manos, rodillas y muñecas, pero se recuperaron rápidamente sin secuelas, retomando sus actividades normales pocos días después.
La acusación pública también informó sobre daños en el equipo de los agentes valorados en 8.386 euros, daños en tres vehículos por 2.595 euros y en equipos de telecomunicaciones tasados en 7.284 euros.