Este miércoles, los padres de Sandra Peña, la adolescente que se suicidó en Sevilla, supuestamente a causa del acoso escolar que sufría, solicitarán a la Fiscalía de Menores que imponga una sanción “contundente y ejemplarizante” al colegio Irladensas de Loreto, donde estudiaba la menor. La familia comparecerá en calidad de testigos perjudicados.
Isaac Villar, tío de Sandra y representante de la familia, compartió con los medios de comunicación que, aunque los padres se encuentran nerviosos, están preparados para relatar los hechos con veracidad, aunque les resulta doloroso revivir los eventos.
“La familia siempre ha contado con el apoyo de la Junta de Andalucía y, en particular, del Defensor del Pueblo”, explicó Villar. Confían en que la Junta actúe con determinación en la comisión que decidirá la sanción administrativa.
Según el portavoz, la familia cree que no se debería considerar otra sanción que no sea la más alta, ya que los fallos en el colegio llevaron a Sandra a tomar la trágica decisión de suicidarse. Esta medida busca prevenir que situaciones similares ocurran en el futuro.
Investigación abierta
La Policía Nacional ha entregado un informe sobre el presunto acoso escolar a la Fiscalía de Menores y la investigación sigue en curso. El Ministerio Público ha abierto dos expedientes: uno para investigar la posible participación de otras menores y otro para evaluar la responsabilidad del colegio en los sucesos que culminaron en el suicidio de Sandra.