Hazte Oír ha decidido ampliar la querella presentada en el Tribunal Supremo contra Francina Armengol, presidenta del Congreso, acusándola de un presunto delito de falso testimonio. La organización sostiene que ella «mintió conscientemente» al afirmar que no conocía a Víctor de Aldama, supuesto intermediario del ‘caso Koldo’, ni había mantenido reuniones con él.
Según un documento recogido por Europa Press, la entidad menciona la comparecencia de Armengol el pasado 8 de julio en la comisión del Senado sobre el ‘caso Koldo’. Esta fue la segunda vez que Armengol participaba en dicha comisión, después de su intervención en junio de 2024, momento en el que, según recuerda Hazte Oír, negó conocer a De Aldama.
La asociación presentó la querella contra ella en junio del año pasado, y tras reconocer Armengol que sí conocía al empresario, Hazte Oír ha decidido expandir su querella. Argumentan que, en su declaración de julio donde admitió haber visto a Aldama, la presidenta de la Cámara Baja nuevamente incurrió en falsedades.
«Hay que indicar, en primer lugar, que en junio de 2024 Aldama aparecía en todos los medios de comunicación como ‘conseguidor’ vinculado a altos cargos del Gobierno, siendo una figura notoriamente conocida. De hecho, la propia querellada admitió haberle visto múltiples veces en televisión. No resulta en modo alguno creíble que no recordase haberse reunido con él, especialmente cuando ella misma ha admitido la posibilidad de que Aldama hablase en una reunión de tan solo 3 personas», señala Hazte Oír.
Es decir, prosigue la entidad, «no fue una reunión multitudinaria, sino una reunión en la que intervinieron pocas personas y en la que hubo cercanía entre las partes». «De hecho, también ha admitido que su secretaria guardaba registro de que Aldama sí que se había reunido con ella, y dada la gravedad de los hechos investigados, no resulta creíble que no hubiese verificado tal extremo antes de su declaración del 7 de junio (de 2024)», añade.
Según la asociación, y a «efectos indiciarios, resulta lógicamente más creíble considerar que inicialmente mintió y que negó todo porque quería evitar verse vinculada con la trama investigada en el ‘caso Koldo’, y que en el momento en el que Aldama hizo pública la existencia de la reunión, reunión que la querellada sin duda conocía y recordaba, no le quedó más remedio que admitirla rápidamente aportando la absurda excusa de que no se acordaba de nada».
«Es más, es pertinente indicar que las afirmaciones que Aldama ha emitido hasta el momento sobre los altos cargos del PSOE están resultando ciertas, admitiendo la propia Armengol la existencia de la citada reunión», indica Hazte Oír.
«ADMITIR LA VERDAD PODRÍA TENER CONSECUENCIAS»
La organización recuerda que en su querella inicial aportaron «capturas de pantalla que acreditarían la existencia de conversaciones de WhatsApp entre la querellada y Aldama, conversaciones que mostrarían una relevante cercanía entre ambos». «Y en su comparecencia del 8 de julio, Armengol volvió a negar la existencia de dichas conversaciones, si bien a la vez admitió la posibilidad de que el contenido de las mismas fuese veraz», subraya.
Hazte Oír considera que existen «indicios suficientes de que la querellada mintió conscientemente porque, precisamente, admitir la verdad podría tener consecuencias políticas». «Existe mentira emitida a sabiendas y con pleno conocimiento de la vulneración del deber de no faltar a la verdad. Y tras conocer hechos objetivos que muestran la existencia de su mentira (mensajes de WhatsApp, reunión presencial) la querellada admite los hechos que resultan imposibles de negar y acude a excusas absurdas con el fin de evitar su responsabilidad», concluye.
Por todo ello, solicitan al Tribunal Supremo «la apertura de un procedimiento penal en el que, practicándose las diligencias que solicitó en su querella inicial, será posible depurar las responsabilidades oportunas».