La Audiencia Provincial de Alicante, específicamente en su Sección Tercera, ha sentenciado a un hombre a 9,5 años de cárcel por abusos sexuales continuados a la hija menor de su pareja sentimental. El condenado realizó tocamientos y otras acciones de índole sexual a la menor.
Además de la pena de prisión, el tribunal ha establecido que el acusado no podrá comunicarse ni acercarse a menos de 500 metros de la víctima, su hogar, trabajo o cualquier otro lugar que ella frecuente durante los diez años posteriores a su encarcelamiento. También deberá compensar a la víctima con 40.000 euros por daños morales, como confirmó el Tribunal Superior de Justicia en un comunicado.
La sentencia incluye una atenuante por dilaciones indebidas y ordena diez años de libertad vigilada tras su liberación, además de inhabilitarle para cualquier trabajo que implique contacto directo y regular con menores durante un periodo que excede en cinco años al de su condena.
Los abusos comenzaron en 2012 en Dénia, cuando la menor, procedente de Rusia, se mudó a España. El hombre, aprovechando su relación de confianza y proximidad, inició los abusos cuando la niña tenía 13 años. Los incidentes se producían principalmente cuando estaban solos, ya fuese en casa o en el taller mecánico del condenado.
El acusado utilizó la manipulación emocional, amenazando con represalias o el retorno de la niña a Rusia si no accedía a sus demandas sexuales. Los abusos cesaron en 2015, cuando la relación entre el hombre y la madre de la menor terminó. La joven reveló los hechos en 2020, tras alcanzar la mayoría de edad, lo que llevó a la denuncia policial. La sentencia aún puede ser recurrida ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.