El Tribunal de Instancia número 3 de El Ejido, en Almería, ha decidido eliminar el secreto de sumario en el caso del asesinato de Antonio Campos, un empleado municipal cuyo cuerpo fue encontrado en el maletero de su coche en San Agustín hace un mes.
Esta medida, tomada el 29 de octubre, posibilitará que todas las partes involucradas accedan a la información de la investigación que hasta ahora solo estaba disponible para la jueza instructora y el fiscal.
La investigación se vio impulsada por los datos obtenidos del teléfono móvil de Antonio Campos, de 54 años, originario de Berja. Estos datos ayudaron a localizar a H., un joven de 23 años, arrestado como sospechoso del homicidio.
Según fuentes cercanas al caso citadas por Europa Press, la policía ha examinado la agenda de contactos de Campos y su historial en Google Maps después de su desaparición a las 21,00 horas del 27 de septiembre. Las cámaras de seguridad y los registros de sus últimos movimientos han sido claves para reconstruir los eventos previos a su muerte.
Otras acciones en la investigación incluyen la toma de huellas en el vehículo para determinar cuántas personas podrían estar involucradas. Aunque H. se negó a declarar ante el juez, ante los investigadores admitió al menos su participación en el crimen. Desde el 3 de octubre, permanece en prisión provisional, sin fianza.
El asesinato ha conmocionado al Poniente almeriense, especialmente en Berja, donde Campos era muy conocido no solo como funcionario, sino también por su labor como historiador y cofrade. Tras el crimen, se organizó una concentración en Berja para denunciar el asesinato y buscar justicia.
La familia del fallecido ha expresado su desconcierto, señalando que algunas pertenencias de Campos aún estaban con él, descartando el robo como motivo, y atribuyendo su muerte a los golpes recibidos en la cabeza.