En la recta final del juicio en Gipuzkoa, la madre enfrentada a cargos por supuestamente intentar acabar con la vida de su bebé de dos meses mediante el síndrome del niño zarandeado en octubre de 2023, ha hecho un llamamiento para que se les permita ‘ser padres’ y reiteró que su único deseo es ‘lo mejor’ para su hija. Esta declaración tuvo lugar durante la cuarta y última sesión del proceso, que se llevó a cabo en la Sección Primera de la Audiencia de Gipuzkoa.
En su intervención final, y sin palabras del padre, la madre, apoyándose en notas tomadas durante las audiencias y mostrando un visible nerviosismo, insistió en su papel como madre. Además, ha planteado que su hija sufre de una ‘alteración genética’, específicamente del ‘gen 22 Q 11′, lo que a su juicio explicaría los graves síntomas observados. Criticó al Hospital Donostia por haber examinado solo ’50 genes’, argumentando que un análisis ‘completo’ debería incluir ‘más de 20.000’.
La madre también refutó haber recibido un diagnóstico completo y negó que se le hubiera hecho seguimiento adecuado post-hospitalización, destacando que ella misma alertó sobre comportamientos anormales de la niña en varias ocasiones. Además, señaló que tras ser dada de alta y trasladada a Zamora, los exámenes oftalmológicos no mostraron daño retiniano y las revisiones fueron normales. La acusada lamentó el tiempo perdido desde que la custodia fue retirada, lo cual, en su opinión, ha perjudicado la salud de la niña.
Por su parte, el fiscal ha mantenido la postura de que los síntomas presentados corresponden inequívocamente al síndrome del bebé zarandeado, solicitando siete años de prisión para los padres y defendiendo que el diagnóstico del Hospital Donostia no fue ‘sesgado’. La defensa, en cambio, ha pedido la absolución argumentando insuficiencia de pruebas concluyentes y ha destacado el comportamiento irreprochable de los acusados, solicitando que se les devuelva la guarda y custodia de su hija.
















