Este miércoles a las 13.00 horas, Andrés Martínez Arrieta y Pablo Lucas asumirán formalmente sus roles como presidentes de la Sala de lo Penal y de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo, respectivamente, después de ocupar estos puestos de manera interina durante varios meses.
El alto tribunal ha anunciado que la ceremonia se llevará a cabo en el Salón de Plenos y se transmitirá en vivo por las redes sociales y la página web del Poder Judicial. Isabel Perelló, presidenta del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Supremo, presidirá el evento, al que asistirán también otros magistrados del tribunal.
La oficialización de sus cargos ocurre tras la publicación de sus nombramientos en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el 28 de agosto, casi un mes después de que el CGPJ finalmente los confirmara en sus puestos tras varios intentos fallidos.
Martínez Arrieta y Lucas, apoyados inicialmente por el sector conservador del CGPJ, obtuvieron la aprobación del Pleno del CGPJ después de que sus rivales, Ana Ferrer y Pilar Teso, apoyadas por el sector progresista, se retiraran, facilitando así estos nombramientos estratégicos.
La Sala de lo Penal es clave por su rol en la investigación y juicio de aforados, incluyendo miembros del Gobierno, senadores y diputados –como José Luis Ábalos–, y otros altos funcionarios, como el fiscal general. Por otro lado, la Sala de lo Contencioso-Administrativo es fundamental en la supervisión de la legalidad de las acciones del Ejecutivo a través de los recursos presentados.
Martínez Arrieta, quien es el número uno en el escalafón judicial, ha liderado la Sala de lo Penal desde diciembre pasado, tras el fin del mandato de Manuel Marchena. A su vez, Luca, tercero en el escalafón, ha encabezado la Sala de lo Contencioso-Administrativo desde diciembre de 2022, después de que César Tolosa fuera asignado al Tribunal Constitucional.
