El ‘Rambo gallego’ justifica sus intrusiones en propiedades por extrema necesidad durante el juicio en Ferrol

Alfredo Sánchez Chacón, alias 'Rambo gallego', defiende en juicio que sus actos fueron por supervivencia ante el frío y el hambre.

El acusado Alfredo Sánchez Chacón declara en el Juzgado de lo Penal número 2, a 24 de noviembre de 2025, en Ferrol, A Coruña, Galicia (España). Europa Press

El Juzgado de lo Penal número 2 de Ferrol ha concluido la fase de vistas del juicio a Alfredo Sánchez Chacón, apodado el ‘Rambo gallego’, acusado de cometer cinco delitos en la comarca a lo largo del periodo entre finales de 2021 y principios de 2022. La sesión, que se inició con un retraso de media hora debido a un accidente que afectó al transporte del acusado, fue notable por el testimonio de Sánchez Chacón, quien se defendió sin abogado tras una negativa a su solicitud de cambio de defensa.

En su declaración, Sánchez Chacón relató cómo sobrevivió cerca de once meses en los montes locales, enfrentando condiciones severas de frío y hambre, y cómo se vio obligado a ingresar a garajes y casas solo por «necesidad» de refugio y alimento. «Estaba muerto de frío y de hambre… Había una puerta abierta y me metí dentro, pero en el garaje. Estaba abierta para resguardarme del frío y coger un poquito, a ver si había algo de comer», explicó sobre los incidentes en una propiedad en Cabanas (A Coruña) y luego en San Sadurniño.

VERSIÓN DE LA FISCALÍA

La Fiscalía, por su parte, argumenta que los actos de Sánchez Chacón se encuadran dentro de delitos de robo con violencia y resistencia a la autoridad. En un incidente específico, el acusado supuestamente agredió con un bastón a alguien que lo descubrió en un garaje de San Sadurniño, hecho que el acusado describió como defensa propia. Además, un guardia civil narró cómo tuvo que disparar al aire y usar su porra para detener a Sánchez Chacón cuando este intentó atacarlo con un bastón al ser sorprendido forzando una ventana.

Al finalizar el juicio, Sánchez Chacón se opuso a la petición de pena de la Fiscalía, recordó sus más de 25 años en prisión y criticó la severidad de la condena solicitada por delitos que, según él, fueron por necesidad de sobrevivir. «Está Ferrol llena de traficantes y a esos nada», lamentó, comparando su situación con la de otros delincuentes.

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