Reducción de pena a 12 años para el implicado en el homicidio de Ugena tras confesar y compensar económicamente

El acusado de matar a un hombre en Ugena confiesa y compensa, lo que reduce su pena de 20 a 12 años y medio.

Audiencia Provincial de ToledoEUROPA PRESS

La fiscalía ha disminuido la solicitud de condena de 20 a 12 años y 6 meses de cárcel para el hombre acusado de asesinar mediante golpes y descargas de un taser a un septuagenario en Ugena (Toledo) el 23 de febrero de 2021. Esta reducción obedece a la aplicación de las atenuantes de confesión y reparación del daño, evidenciado por el depósito de 6.000 euros para responsabilidad civil por parte del acusado.

La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Toledo ha acogido el juicio, que contó con jurado popular, contra A.K.S, quien admitió su implicación en el crimen durante la sesión. En el suceso también estuvo involucrada una menor, su pareja, ya sentenciada, y R.E.G., a quien se le imputa un año de prisión por encubrimiento, aunque su actual paradero es desconocido.

A.K.S. relató que conocía a la víctima, apodada ‘Santiago el Abuelo’, por comprarle drogas. Explicó que días antes del homicidio, hubo una disputa por la cantidad de droga proporcionada, lo que generó una discusión no muy intensa, según su versión. El día del asesinato, acompañado por su novia menor de edad, volvió al domicilio de la víctima para realizar otra compra. Según su testimonio, fue ella quien tocó el timbre para evitar que ‘el abuelo’ no le abriera la puerta debido a la discusión previa.

El acusado declaró que, al entrar en la vivienda, tomó un taser que creyó era una linterna, situado junto a un mueble, para agredir a J.R.D. al ver una escopeta cerca. Afirmó que no se percató de que el dispositivo pudiera emitir descargas eléctricas y que golpeó a la víctima en la cabeza sin intención de matarla, aunque reconoció la gravedad de los golpes propinados.

Tras el ataque, huyó con su novia y R.E.G., a quien entregó la ropa con sangre y la escopeta para deshacerse de ellas. Testigos y agentes de la Guardia Civil también prestaron declaración, describiendo el estado del apartamento y el cuerpo de la víctima, quien fue encontrado con múltiples lesiones en la cabeza y un taser en la boca.

Los forenses confirmaron que la causa de la muerte fue por las descargas eléctricas recibidas. Al finalizar la vista, el acusado aceptó la petición de pena reducida del fiscal. El jurado, tras recibir el veredicto, comenzó la deliberación.

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