El Juzgado de Primera Instancia número 6 de Ferrol ha anulado la condena de 1943 a José Varela Cachaza, empleado de Telégrafos, dictada por un consejo de guerra durante el régimen franquista, reconociendo así la represión política sufrida. Varela Cachaza fue arrestado el 19 de mayo de 1942 por poseer escritos de Indalecio Prieto, acusándolo de incitar a la rebelión y condenándolo a seis años y un día de cárcel, de los cuales cumplió dos en la prisión militar del Castillo de San Felipe hasta el 15 de mayo de 1944.
La sentencia actual, que se basa en la Ley de Memoria Democrática, no solo destaca la privación de libertad y empleo público de Varela, sino también el impacto económico y emocional sobre su familia, que tuvo que enfrentar estigmas y dificultades financieras significativas durante la dictadura. Sus hijos, José y Francisco, empezaron a trabajar desde jóvenes para sostener el hogar y vivieron bajo un ambiente de temor constante.
NUEVA LEY
En octubre de 2025, el Ministerio Fiscal inició el procedimiento para anular la sentencia basándose en la Ley 20/2022 de Memoria Democrática. Esta ley permite revisar hechos históricos cuando no hay controversias pendientes. Con pruebas incluidas de familiares y documentos históricos, el juzgado confirmó los hechos y declaró la nulidad de la condena por ser «ilegal e ilegítima», ordenando además la inscripción de esta nulidad en los registros judiciales y el envío de la resolución a la Secretaría de Estado de Memoria Democrática.
La magistrada Carmen López Moure citó la Ley de Memoria Democrática para fundamentar la ilegitimidad de las condenas franquistas y el derecho a la reparación y reconocimiento de las víctimas. Los hijos de Varela expresaron su conformidad con la decisión, que representa un reconocimiento oficial de la injusticia sufrida por su padre.