El clérigo de Toledo, arrestado el pasado lunes 22 de septiembre en Torremolinos (Málaga) con drogas, ha sido puesto en libertad provisional, según ha decidido el Juzgado de Instrucción número 5 de la localidad.
Esta información fue confirmada por fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), quienes señalaron que el sacerdote, llevado ante la justicia el martes anterior, se acogió a su derecho a no declarar y tendrá que presentarse ante la justicia siempre que sea requerido.
El religioso está siendo investigado por un posible delito de salud pública debido a que, según indicaron las fuentes, se le encontraron varias pequeñas cantidades de diferentes sustancias, cuyo total excede lo permitido para consumo propio.
El proceso continúa en el mismo juzgado, que estaba de guardia durante la detención y comparecencia del implicado, y aún se espera el análisis de las sustancias confiscadas.
La Policía Nacional de Torremolinos detuvo al sacerdote tras ser descubierto en la madrugada del 22 de septiembre con varias dosis de estupefacientes. Según informa el Diario ‘SUR’, el cura había alquilado un apartamento vacacional con varios jóvenes, donde presuntamente consumían drogas. La situación escaló cuando uno de los turistas causó un alboroto, llevando a la intervención policial que descubrió las drogas.
El Arzobispado de Toledo, tras confirmar el arresto, expresó en un comunicado su profundo lamento por los sucesos y condenó cualquier acto delictivo que el sacerdote pudiera haber cometido. Señalaron su total confianza en el sistema judicial y su disposición a colaborar con éste. Además, el clérigo ha sido suspendido cautelarmente de sus funciones por el Arzobispado de Toledo, medida que también ha sido comunicada por la Diócesis de Málaga.