Pilar Sánchez Acera, ex secretaria de política institucional del PSOE de Madrid, ha declarado que nunca tuvo acceso al correo que Alberto González Amador, pareja de la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, envió a la Fiscalía el 2 de febrero de 2024. En dicho correo, González Amador proponía admitir dos delitos fiscales a cambio de un acuerdo. Sánchez Acera explicó que recibió un pantallazo con información similar a través de un medio de comunicación, no de la Fiscalía General del Estado.
Durante su testimonio como testigo en la tercera sesión del juicio en el Tribunal Supremo contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, acusado de haber filtrado a la Cadena SER el correo en cuestión, Sánchez Acera aclaró: «En ningún momento recibo ni tengo en mi poder el correo de 2 de febrero objeto de investigación. Recibo una imagen de un documento distinto». Además, detalló que el material recibido no contenía datos de emisor, destinatario ni fecha, solo un pie de firma de un despacho de abogados.
Interrogada sobre cómo obtuvo el pantallazo que luego compartió con Juan Lobato, entonces líder de los socialistas madrileños, el 14 de marzo de 2024, Sánchez Acera reafirmó lo indicado en la fase de investigación: que le llegó a través de «un medio de comunicación», sin poder especificar cuál fue ni el periodista que lo proporcionó. También mencionó que no pudo verificar esta información posteriormente debido a un cambio de móvil en septiembre de 2024.
En su declaración, negó que el abogado Carlos Neira o alguien de la Fiscalía le facilitaran el documento y respondió negativamente a las preguntas de la defensa de García Ortiz sobre si conocía a alguien de la Fiscalía o si había recibido el documento de esta entidad.
Asimismo, Sánchez Acera afirmó que no compartió el pantallazo con nadie más que Lobato, y negó haberlo enviado a otras personas. Los mensajes de WhatsApp entre Sánchez Acera y Lobato, aportados a la investigación, revelan que ella le proporcionó la imagen y le sugirió usarla contra Díaz Ayuso en un Pleno de la Asamblea de Madrid, advirtiéndole sobre la precaución con los datos personales y animándole a confrontar a Ayuso en su intervención.
















