La Fiscalía de Área de Gijón ha propuesto una condena acumulada de 22 años de prisión para un acusado que, tras entablar contacto con un menor con discapacidad intelectual leve, no solo mantuvo relaciones sexuales con él, sino que también lo grabó y chantajeó con divulgar los vídeos si el joven no seguía accediendo a sus demandas. Asimismo, intentó un proceder similar con otro menor, aunque sin éxito. El juicio se llevó a cabo este miércoles en la Sección Octava de la Audiencia Provincial de Gijón y ya se espera sentencia.
El acusado, nacido en Cuba en 1984, inició comunicaciones a principios de 2021 con el joven, de 16 años en ese momento, mediante una aplicación donde intercambiaron material sexual. Durante el verano, se encontraron en la vivienda del acusado donde ocurrieron los actos sexuales, consentidos por el menor, aunque este sufría de una capacidad reducida para tomar decisiones. Posteriormente, al negarse el menor a continuar con los encuentros, el acusado le amenazó con hacer públicas las grabaciones y enviarlas incluso a su madre, lo que llevó al menor a ceder ante el miedo a las represalias.
En su domicilio, el acusado usó una cámara oculta para filmar al menos once vídeos de sus encuentros sexuales, que no se ha demostrado que hayan sido compartidos. Además, en enero de 2023, el acusado intentó contactar con otro joven de 17 años a través de la misma aplicación, pero tras la negativa de este a mantener relaciones, también lo amenazó con difundir su material íntimo. No se ha confirmado la distribución de este material.
Los delitos imputados incluyen agresión sexual continuada, producción de pornografía y coacciones. Además, la Fiscalía pide que el acusado compense económicamente a las víctimas con 10.000 euros y 200 euros, respectivamente, más intereses legales.