En el juicio que se celebra en Ibiza por el incendio mortal ocurrido en ses Païsses, donde falleció un anciano, la acusada ha refutado las alegaciones de que se aproximara a la vivienda del difunto, que era el padre de su pareja, para iniciar el fuego en la madrugada del 3 de agosto de 2023.
El proceso judicial con jurado está próximo a concluir este lunes, tras la declaración de la acusada, a quien la Fiscalía solicita una pena de prisión permanente revisable, y la presentación de los informes de cada parte.
La mujer solo ha respondido a las cuestiones planteadas por su defensor, Cándido Valladolid, negando todas las imputaciones. Admitió haber salido de su casa a la 01.05 horas esa noche, pero aseguró que no se dirigió hacia la residencia del anciano. Según su testimonio, solía caminar a esa hora por sentirse más segura tras un intento de atropello por parte de su excompañero.
La acusada ha reconocido parcialmente su presencia en las grabaciones de seguridad del área, pero declaró que su destino fue la estación de autobuses, no la casa del incidente. También negó haber sido expulsada de la vivienda por las hijas del difunto, haber solicitado dinero a la familia o haberse autoproclamado como figura central de la familia tras un intento de suicidio de su pareja días antes del suceso.
Respondiendo siempre a su abogado, la mujer expresó no entender por qué fue acusada directamente por una de las hijas del fallecido tras conocerse el incidente. «Se ve que le caía mal porque salía con su hermano», declaró. Afirmó además no poseer llaves de la vivienda ya que siempre visitaba el lugar acompañada de su pareja o para pasear al perro con la esposa del anciano.
Desde el pasado lunes, el Tribunal del Jurado de la Audiencia Provincial lleva a cabo el juicio contra la mujer acusada de asesinato e incendio, donde se alega que provocó el incendio en una vivienda donde residían dos personas mayores, resultando en la muerte de uno de ellos, completamente dependiente y sin capacidad para evacuar el lugar.
