Una jueza de Catarroja, en Valencia, está llevando a cabo una investigación sobre la gestión de la devastadora dana que afectó severamente a la región, cobrándose la vida de 229 personas. Recientemente, se ha incorporado al caso un documento que contiene transcripciones de llamadas del servicio de teleasistencia, captando los momentos de angustia vividos por una hija al intentar ayudar a su padre, un hombre con movilidad reducida y que se encontraba solo en su casa durante el evento. La hija expresó en una de las llamadas: «Yo la última vez que pude hablar con él dice que el agua le llegaba a las rodillas».
Las transcripciones reflejan inicialmente que el afectado contactó con teleasistencia para informar que el agua había invadido su vivienda, diciendo: «Tengo medio metro de agua en casa». La operadora le sugirió buscar un lugar elevado y trató de contactar a su hija para alertarla de la situación. En llamadas posteriores, la preocupación y la desesperación se palpaban en cada intercambio. La hija, atrapada en la carretera y también en riesgo de inundación, intentaba coordinar el rescate de su padre, enfrentándose a la falta de respuesta de servicios de emergencia como el 112 y los bomberos.
La jueza Nuria Ruiz Tobarra ha solicitado a la Conselleria de Emergencias que aporte, en un plazo máximo de tres días, cualquier orden que se hubiera emitido durante los días críticos de la dana, para determinar si se advirtió adecuadamente a los usuarios del servicio de teleasistencia y a sus familias sobre el peligro inminente.










