Los exaltos cargos del Gobierno regional madrileño Carlos Mur, Pablo Busca y Francisco Javier Martínez Peromingo han sido llamados a declarar de nuevo este miércoles en los juzgados de Collado Villalba, en el marco de una de las investigaciones abiertas por la posible denegación discriminatoria de atención sanitaria a residentes de centros de mayores durante la primera ola de la pandemia.
La citación procede del Juzgado de Instrucción n.º 2 de Collado Villalba y se enmarca en una causa separada relativa al fallecimiento de una residente de Sanitas Torrelodones. En este procedimiento figuran igualmente como investigados los geriatras de enlace del Hospital Puerta de Hierro y del Gregorio Marañón.
Estas nuevas comparecencias se celebrarán después de que Carlos Mur y Pablo Busca no se presentaran este martes ante el juez, pese a estar citados. Esa incomparecencia llevará a la acusación particular a pedir la emisión de órdenes de busca y captura contra ambos por, a su juicio, eludir la acción de la Justicia.
Las declaraciones previstas para este martes suponían la reactivación de la causa de las residencias tras varios meses de inactividad. Distintos juzgados se habían inhibido a favor del Juzgado de Instrucción n.º 3 de Madrid con la intención de acumular los procedimientos en una macrocausa sobre los mismos hechos, pero el titular de ese órgano rechazó la acumulación y la cuestión ha quedado ahora pendiente de lo que resuelva la Audiencia Provincial de Madrid.
El único exalto cargo que sí acudió este martes fue Francisco Javier Martínez Peromingo, quien manifestó ante el juez que los protocolos remitidos a los geriatras en marzo de 2020 eran “discriminatorios” y que él mismo lo advirtió en repetidas ocasiones a Carlos Mur, tanto por escrito como a través de mensajes de WhatsApp.
En la jornada también prestó declaración el geriatra de enlace del Hospital Gregorio Marañón. El facultativo aseguró no conocer los protocolos objeto de investigación y sostuvo que se limitó a aplicar sus propios criterios clínicos. Reconoció que el padre de la denunciante no fue derivado al hospital, aunque no pudo concretar el diagnóstico que presentaba en aquel momento.










