Según la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, Antonio Olivera, quien ocupaba el cargo de viceconsejero de la Presidencia del Gobierno de Canarias y posteriormente director del Servicio Canario de Salud, aseguró la adquisición de mascarillas en un momento en el cual aún se debatía la factibilidad de la operación dentro de la administración canaria, manifestando preocupaciones por el costo y la calidad de las mismas.
Los investigadores han llegado a esta conclusión en un informe entregado a la Audiencia Nacional dentro del ‘caso Koldo’, donde se examina la compra de material sanitario a la empresa Soluciones de Gestión, que se encuentra en el centro de la supuesta trama de mascarillas, por un valor de 12 millones de euros.
La Guardia Civil señala que la propuesta de contratación de esta empresa por parte del Gobierno canario podría haber sido sugerida por el Ministerio de Transportes bajo la dirección de José Luis Ábalos, a través de Olivera. Además, los encargados de la contratación dentro de la administración canaria expresaron dudas sobre la conveniencia de este contrato debido a un precio considerado excesivo y la suficiencia de stock por las compras realizadas previamente.
El material analizado por los investigadores muestra que la primera conexión de Soluciones de Gestión con la venta de mascarillas a Canarias se remonta al 20 de abril de 2020, cuando Marco Sansavini, director comercial de Iberia y CEO de Vueling, comunicó la cancelación de varios vuelos a Koldo García e Íñigo Rotaeche.
Un día después, Víctor De Aldama, presunto intermediario de la trama, facilitó a Íñigo Rotaeche el contacto de Olivera, que había sido proporcionado previamente por Koldo con la invitación a contactarlo como ‘el vicepresidente de Canarias’. El informe destaca que Olivera se comunicó con Koldo García, asesor de Ábalos en ese momento, para coordinar el envío de las mascarillas.
Finalmente, los investigadores concluyen que Soluciones de Gestión ya estaba suministrando mascarillas a la administración canaria incluso antes de formalizar las adjudicaciones del contrato, destacando el control ejercido por Koldo en estas operaciones.