La Administración de la Comunidad Foral de Navarra y el Gobierno de España han pactado la cesión de la propiedad de los segmentos de la Autopista AP-68 Bilbao-Zaragoza que atraviesan Navarra, junto con las funciones y servicios relacionados con estos tramos.
El vicepresidente primero y consejero de Presidencia e Igualdad del Gobierno de Navarra, Félix Taberna, destacó que “este nuevo acuerdo evidencia el firme compromiso del Gobierno de Navarra de avanzar en el fortalecimiento de nuestro autogobierno, con el pleno desarrollo de las competencias establecidas en el Amejoramiento”.
Félix Taberna también resaltó que “los gobiernos navarro y central demostramos una vez más nuestra sintonía y capacidad de acuerdo para recuperar funciones y servicios en competencias históricas de Navarra”.
Este convenio deberá recibir el respaldo inicial de los representantes navarros en la Junta de Transferencias y, más adelante, de la comisión mixta de dicha Junta.
Desde el Gobierno de Navarra se ha informado que la transferencia de funciones y servicios del segmento navarro de la AP-68 será efectiva desde el día en que se publique el real decreto que oficialice la baja de estos tramos en la Red de Carreteras del Estado.
Se constituirá una Comisión Técnica, compuesta por un número igual de miembros por parte de la Comunidad Foral de Navarra y del Estado, para facilitar la cooperación, fomentar la colaboración, coordinar el intercambio de información y resolver cualquier discrepancia que pueda surgir en la interpretación, ejecución y cumplimiento de este acuerdo.
CASI 40 KILÓMETROS DE AP-68
En la actualidad, el Gobierno de Navarra posee la titularidad de la red vial que cruza su territorio, salvo por la AP-68, que es parte de la Red de Carreteras del Estado.
El trayecto comprendido en este acuerdo tiene una longitud de 39,5 kilómetros, y se divide en dos partes: una de 4,2 kilómetros, entre el p.k. 162+563 y el p.k. 166+851, y otra de 35,3 kilómetros, entre el p.k. 201+622 y el p.k. 236+988.
Actualmente, la AP-68 está bajo un modelo de concesión administrativa gestionada por la Sociedad Autopista Vasco-Aragonesa, S.A.(AVASA), cuya concesión concluirá en noviembre de 2026. Hasta entonces, el Estado seguirá manteniendo todas las obligaciones y derechos económicos y financieros derivados del contrato de concesión vigente.
Después de un acuerdo en marzo pasado para “que Navarra pudiera recuperar la competencia plena de tráfico después de 60 años”, en tres años la Policía Foral tomará el control exclusivo de la vigilancia y gestión de carreteras. En julio de 2026, Navarra también asumirá la tramitación, resolución y recaudación de los expedientes sancionadores, consolidando sus competencias históricas en tráfico y seguridad vial.











