Azucarera pondrá en marcha la nueva temporada remolachera este lunes, 27 de octubre, con la apertura de su establecimiento en Toro, ubicado en Zamora, donde por primera vez se procesará íntegramente la cosecha del norte, que abarca unas 9.500 hectáreas.
La compañía ha anunciado que proporcionará a los agricultores 21 cosechadoras integrales y seis equipos de extracción para áreas especialmente rocosas, principalmente en León y cerca de Toro, sumando un total de 27 máquinas de recogida a las que se añadirán 13 cargadores limpiadores.
Se espera que la fábrica de Toro procese diariamente unas 8.000 toneladas líquidas de remolacha, extendiendo la duración de esta campaña a unos tres meses y medio. Los trabajos de extracción del cultivo se organizarán de manera escalonada, teniendo en cuenta la maduración para optimizar el contenido de sacarosa.
Salomé Santos, directora Agrícola de Azucarera, ha mencionado que las condiciones climatológicas recientes han favorecido el control de enfermedades al final del ciclo, lo que supone un cultivo con «mejores perspectivas» que el año anterior. «Estamos viendo un cultivo más sano, lo que probablemente se traducirá en rendimientos superiores a los de la campaña pasada», afirmó Santos.
Para esta campaña, la fábrica de Toro contará con 158 empleados directos y generará numerosos empleos indirectos, incluyendo los conductores de los 200 camiones que transportarán la remolacha. Azucarera ha asegurado que los agricultores que antes entregaban su producción en La Bañeza y Miranda de Ebro no experimentarán «ninguna diferencia» en el proceso, ya que la empresa gestionará toda la logística necesaria.
«La única diferencia es que toda la remolacha se molturará en Toro», indicó la empresa, destacando que esta consolidación permitirá focalizar inversiones y mejorar la competitividad en un mercado exigente, según explicó Santos.















