Ante el reciente brote de peste porcina africana (PPA) detectado en Cataluña, el Govern ha decidido incrementar la vigilancia y las medidas de bioseguridad en Baleares, según ha informado Fernando Fernández, director general de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural. Este anuncio se produce tras la segunda reunión del Comité Rasve, organizada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para evaluar la situación del brote en jabalíes silvestres en Cataluña.
Durante la reunión, se ha confirmado un nuevo foco del virus en Cerdanyola del Vallès, dentro del área ya controlada desde el 28 de noviembre. Fernández ha reiterado el compromiso del Govern con las autoridades nacionales y catalanas, agradeciendo la eficacia en las respuestas y las acciones implementadas hasta la fecha.
«Tenemos plena confianza en las autoridades catalanas y en el Ministerio, que serán capaces de controlar este brote sin que salga de la comarca delimitada», ha señalado Fernández. Además, ha recordado la importancia de mantener altas precauciones a medio plazo, siguiendo el reglamento europeo que indica un periodo de vigilancia intensiva de al menos un año tras el último caso confirmado.
REFUERZO DE LA VIGILANCIA EN BALEARES
Las autoridades baleares ya han empezado a reforzar el control sobre el traslado de porcinos desde Cataluña, tanto para cría, engorde como para sacrificio. Se han revisado los movimientos de los últimos 12 meses, especialmente los de noviembre, y se ha trabajado con los mataderos para reforzar las medidas de bioseguridad.
Se intensificará la inspección en explotaciones con alto riesgo y se verificarán todas las guías sanitarias de movimiento de animales. Además, se reforzará la desinfección de vehículos de transporte de ganado, especialmente en zonas de mayor riesgo.
Según datos del sistema Sitran, se han registrado movimientos de 3.301 animales destinados a sacrificio y 2.118 animales vivos hacia explotaciones del archipiélago, todos procedentes de zonas no restringidas. Fernández ha enfatizado que, a pesar de la delicada situación, no es posible restringir legalmente la entrada de animales de otras zonas del país que cumplan con la normativa sanitaria vigente.
Finalmente, desde el Govern se ha transmitido un mensaje de tranquilidad a los ganaderos y a la población, recordando que la peste porcina africana no afecta a los humanos. Las medidas de control y bioseguridad se mantendrán activas para proteger al sector y garantizar la seguridad sanitaria en Baleares.











