Los sindicatos CCOO y UGT han organizado para este martes una concentración delante de la sede de la asociación de organizaciones de productores de frutas y hortalizas de la provincia de Almería (Coexphal), con el objetivo de denunciar la ausencia de progresos en la negociación del convenio colectivo del sector del manipulado hortofrutícola, que da empleo a unas 30.000 personas en la provincia.
La representación sindical ha optado por trasladar la protesta hasta la sede principal de la patronal para escenificar su malestar ante su «inacción» a la hora de avanzar en cuestiones como la mejora de los salarios y la regulación de la jornada laboral mediante un convenio considerado clave para la actividad.
Durante los últimos meses, ambas partes han celebrado alrededor de una decena de reuniones en las que, según señalan los sindicatos, no se han incorporado avances suficientes. Entre sus reivindicaciones figuran subidas salariales de hasta el cuatro por ciento por encima del SMI y una jornada de trabajo ajustada al Estatuto de los Trabajadores, que reduzca las actuales 46 horas semanales a 40, junto con otros puntos.
Las organizaciones sindicales responsabilizan a los empresarios de no adoptar una actitud verdaderamente proactiva. En esta línea, desde FICA UGT se ha lanzado un «llamado urgente» a que «se retomen y se evolucione en aquellos temas cruciales» que afectan a las plantillas, especialmente en lo relativo a unas retribuciones acordes a los «resultados históricos» de la última campaña hortofrutícola, que registró una mejora del 22 por ciento respecto a la anterior, según han subrayado.
Para el sindicato, los empresarios «no pueden negar que se encuentran en buenas condiciones para que sus trabajadores y trabajadoras, partícipes de esas buenas cifras, puedan también beneficiarse de ello», han manifestado, insistiendo en que la mejora del negocio debe reflejarse en las nóminas.
En este contexto, la secretaria provincial de FICA UGT en Almería, Francisca Ramírez, ha exigido que las conversaciones sean «constructivas», que «permitan el diálogo» y que sirvan para «mejorar las condiciones laborales que garanticen los derechos fundamentales de todos y las trabajadoras».
«Es la hora de tomar decisiones significativas que desbloqueen el nulo avance actual de las reuniones y que permitan consolidar acuerdos que beneficien a todos», ha reiterado, responsabilizando a la patronal de la actual parálisis negociadora, una situación que, a su juicio, «no puede prolongarse más».











